El presidente ruso, Vladimir Putin, ha declarado que su país no quiere ocupar Ucrania mientras la invasión de Moscú entra a la cuarta semana sin que se vislumbre el fin del conflicto.
“La aparición de tropas rusas cerca de Kiev y otras ciudades de Ucrania no está relacionada con la intención de ocupar este país. No tenemos ese objetivo, y también lo dije directamente en mi discurso del 24 de febrero”, dijo Putin en una reunión del gobierno televisada el 16 de marzo. Sin embargo, Rusia se vio obligada a “no tener otra opción para la autodefensa”, dijo.
Al caracterizar al gobierno de Kiev como “pro-nazi”, Putin señaló el “verdadero genocidio” de personas en la región ucraniana de Dombás que estuvieron, durante casi ocho años, sometidas a los “métodos más salvajes”. Según Putin, el gobierno ucraniano impuso bloqueos y acciones punitivas a gran escala, además de llevar a cabo constantes bombardeos de artillería y “ataques terroristas” en Dombás.
«¿Y para qué? Solo porque ellos buscaban los derechos humanos elementales–vivir de acuerdo con las leyes y tradiciones de sus antepasados, hablar su idioma nativo, criar a sus hijos como ellos quieren”.
Kiev también planeó unirse a la OTAN mientras las autoridades hacían declaraciones sobre el desarrollo de armas nucleares, cosas que Putin dijo que eran una “amenaza real”.
En el futuro, el régimen “pronazi” podía tomar armas de destrucción masiva, cuyo objetivo sería Rusia. El presidente también acusó a Ucrania de tener una “red de docenas de laboratorios” financiados por el Pentágono de Estados Unidos que estaba llevando a cabo “programas biológicos militares”.
A pesar de las repetidas advertencias de que estas acciones representaban una amenaza directa para la seguridad de Rusia, Ucrania, Estados Unidos y la OTAN rechazaron tales preocupaciones con “ostentoso y cínico desdén”, dijo Putin.
Por lo tanto, Moscú se quedó “sin opciones para resolver los problemas pacíficamente” y se vio obligada a lanzar una “operación militar especial”.
El presidente ruso también criticó las sanciones occidentales impuestas al país y dijo que se habrían impuesto sanciones y restricciones contra Rusia “en cualquier eventualidad”. La acción militar de Moscú contra Ucrania solo proporcionó a Occidente un “pretexto para nuevas sanciones”.
Putin también afirmó que los ciudadanos rusos en muchas naciones occidentales enfrentan discriminación y se les niega atención médica, trabajos, el derecho a celebrar su cultura, etc. solo porque son de Rusia.
“Tratando de ‘cancelar’ a Rusia, Occidente se arrancó todas las máscaras de la decencia, comenzó a actuar groseramente, demostró su verdadera naturaleza”, agregó. “Simplemente pide una analogía directa con los pogromos antisemitas que los nazis organizaron en Alemania en los años 30 del siglo pasado, y luego sus secuaces de muchos países europeos que se unieron a la agresión de Hitler contra nuestro país durante la Gran Guerra Patria”.
Mientras la guerra entre Rusia y Ucrania entra a su cuarta semana, Moscú continúa bombardeando ciudades ucranianas. Desde la invasión, se han confirmado 780 muertes de civiles y 3.2 millones de refugiados, según el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados.
Ambos países están negociando una resolución, pero aún no han llegado a un acuerdo. El primer ministro polaco Mateusz Morawiecki ha dicho que solicitará una misión de mantenimiento de la paz de la ONU en Ucrania en la próxima cumbre de la OTAN.
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