La salud del colon es una preocupación real, no importa quién sea. Encontrar formas de mantenerlo sano es una prioridad para los hombres y mujeres de todo el mundo.
Puede que le sorprenda saber que unas pocas y pequeñas decisiones cada día tienen el potencial de reducir el riesgo de enfermedades relacionadas con el colon de manera significativa.
Me gustaría que pensara en la frecuencia con la que oye hablar de «salud intestinal». Pero, ¿adivinen qué? La salud intestinal es prácticamente sinónimo de salud del colon. De los aproximadamente 40 trillones de bacterias que residen en su cuerpo, la gran mayoría se mantienen en sus intestinos.
Las que viven en el colon pueden tener un impacto masivo en el riesgo de enfermedades relacionadas con el colon.
Usted tiene mucho poder sobre qué tipos de bacterias se alojan ahí.
Las bacterias que viven en su cuerpo pueden combatir las enfermedades o contribuir a ellas. Realmente se trata de cuáles vivirán dentro de uno. En términos generales, un conjunto diverso es saludable y puede ayudar a luchar contra la enfermedad.
El riesgo de enfermedad aumenta cuando la población es en gran medida homogénea.
Hay un componente genético en su microbiota (población intestinal), pero puede manipularlo con la elección de los alimentos. Hay muchos datos que sugieren que cuanto más diversa es la dieta de una persona, más diversa y saludable es su población bacteriana intestinal.
¿Cómo es una dieta diversa? Ciertamente no como la dieta occidental o la dieta estadounidense estándar, típicamente compuesta de carne, papas, comida chatarra y alimentos con un tono uniforme de color tostado.
Esas cosas, particularmente el tostado y la comida chatarra, pueden secuestrar las bacterias de su intestino. El azúcar y la grasa pueden sabotear la salud del colon.
En su lugar, querrá construir su dieta en torno a alimentos ricos en fibra, que alimentan a las bacterias saludables, para que crezcan y se reproduzcan. Conocidos como prebióticos, estos alimentos pueden tener un gran impacto en la salud del colon y ayudar a reducir el riesgo de enfermedades.
Así que, la próxima vez que vaya a comer un bocadillo o a preparar una comida, pruebe con frutas y verduras de colores. Algunos alimentos prebióticos excelentes incluyen:
Frambuesas
Arándanos
Alcachofas
Granos enteros
Patatas (no son particularmente ricas en fibra cuando se pelan, pero tienen una resistencia al almidón, que pueden alimentar a las bacterias intestinales sanas)
Brócoli
Frijoles
Lentejas
Verduras de hoja verdes
Mohan Garikiparithi es licenciado en medicina por la Universidad de Osmania (Universidad de Ciencias de la Salud). Practicó medicina clínica durante más de una década. Durante un programa de comunicaciones de tres años en Alemania, desarrolló un interés en la medicina alemana (homeopatía) y otros sistemas alternativos de medicina. Este artículo fue publicado originalmente en Bel Marra Health.
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