Juan José Márquez desapareció el martes, en la terminal internacional del aeropuerto internacional Simón Bolívar, en Venezuela, mientras su sobrino, el presidente encargado Juan Guaidó, logró salir en un automóvil hacia Caracas.
Ante el hecho, tanto Guaidó como su esposa, denunciaron la desaparición que adjudicaron al líder chavista Nicolás Maduro.
La familia, la OEA, funcionarios de EE.UU. y el abogado de Márquez, han exigido su liberación, y considerado que es una medida que busca presionar y «atacar» a Guaidó.
El secuestro de mi tío Juan José Márquez, a manos de la dictadura, pone en evidencia la crueldad a la que están expuestas más de 380 familias de los presos políticos.
Deben pagar el costo de la crueldad, porque estamos del lado de la verdad y vamos a desmontar su farsa.
— Juan Guaidó (@jguaido) February 13, 2020
El régimen dice que está en presión porque supuestamente violó las normas de aeronáutica civil al traer en su equipaje «sustancias prohibidas» como pequeñas porciones del explosivo conocido como C-4 y chalecos antibalas.
Guaidó ha hecho responsable a Nicolás Maduro de lo que pueda pasar con Márquez:, a quien describe como «un hombre honesto y valiente que conoce como nadie el valor de esta lucha y cuyo único problema es preocuparse por su familia».
Juan José es piloto de aviación, tiene cinco hijos y está casado con Romina Botaro, quien ha señalado que su marido es inocente de lo que se le acusa.
“Pensaba que lo iba a ver, y hoy en el DGCIM me dijeron que tenía que esperar 30 días para verlo, que no estaban permitidas las visitas, y que tampoco le podía facilitar comida”, explicó Botaro a la prensa.
Dice, además, que su esposo no tiene relación ninguna con la política y que «como cualquier tío protector, quiso acompañar el retorno de su sobrino al país».
«Mi esposo es un hombre de familia, un trabajador, no tiene ningún tipo de recorrido político ni prontuario policial. Estoy tranquila porque no hay manera que puedan imputar algo a mi esposo», afirmó.
Márquez tiene 54 años y según le dijo a BBC Mundo, Ángel Briceño, amigo del líder opositor, Juan José fue «la figura paterna de Guaidó después de la separación de sus padres».
Al hermano menor de Norka Marquéz, la madre de Guaidó, le apodan «Cheché».
«En la vida de Juan, su tío ha sido su mentor y su guía, quien lo ha impulsado a realizar sus sueños y objetivos», afirmó Briceño al medio londinense, quien agrega que siempre ha acompañado a su sobrino, en los momentos más difíciles, como la Tragedia de Vargas.
Según El Pitazo, Márquez se crió en la parroquia Caraballeda y vive en Caracas, con su esposa y sus hijos. Regresó con el presidente encargado porque se encontraba fuera del país y decidió apoyarlo al final de su gira internacional.
Ante las acusaciones del régimen de Maduro, su abogado Joel García ha manifestado en que se trata de una jugada para presionar e intimidar a Guaidó.
«Está bien, traía su chaleco antibala, no los declaró, lo traía puesto; pero traía unas linternas tácticas», las cuales contenían en el compartimiento de las baterías «presuntamente explosivo sintético C-4», afirmó.
«Entró a un vuelo de estos con chalecos antibalas. Eso está prohibido», remató el presidente de la oficialista Asamblea Costituyente, Diosdado Cabello.
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