El Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS, por sus siglas en inglés) reanudará a finales de septiembre su programa de pruebas gratuitas a domicilio de COVID-19, en medio de aumento de casos de infección durante el verano, según funcionarios de la administración.
Los hogares estadounidenses pronto podrán solicitar hasta cuatro pruebas COVID-19 gratuitas a través del sitio web COVIDTests.gov, y las pruebas se entregarán directamente en sus casas, informaron el viernes funcionarios del HHS.
Las pruebas ayudarán a detectar las variantes de COVID que están circulando actualmente y se podrán utilizar hasta finales de año, según un sitio web del gobierno.
Dawn O’Connell, subsecretaria de preparación y respuesta del HHS, dijo que ésta es la séptima vez en los últimos tres años que la administración pone a disposición pruebas gratuitas de COVID-19 de venta libre a los hogares estadounidenses.
«Estas pruebas ayudarán a mantener a salvo a las familias y a sus seres queridos en esta temporada de otoño e invierno», declaró O’Connell durante una rueda de prensa.
Desde el inicio del programa en 2021 se han distribuido más de 1800 millones de pruebas COVID de venta libre, y más de 900 millones de pruebas gratuitas para realizar en casa a través del sitio web, según O’Connell.
El programa se ha interrumpido y retomado varias veces. La administración suspendió inicialmente el programa en marzo a raíz de un descenso de las hospitalizaciones relacionadas con el COVID-19 en aquel momento.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus silgas en inglés) de EE.UU. declararon el viernes que las infecciones por COVID-19 estaban aumentando en 27 estados hasta el 16 de agosto. La positividad de las pruebas de COVID fue del 18% en todo Estados Unidos durante la semana que finalizó el 17 de agosto, según los datos de los CDC.
La directora de los CDC, Mandy Cohen, dijo durante la conferencia de prensa del viernes que la agencia espera que haya «un número similar o menor» de hospitalizaciones durante la temporada.
«La severidad del COVID se parece a la de la gripe, pero si seguimos enfrentando la gripe y el COVID, en términos de qué está hospitalizando más gente y qué está matando a más gente, el COVID sigue siendo un virus más peligroso que la gripe», dijo Cohen.
Según Cohen, las vacunas siguen siendo la herramienta «más eficaz» para proteger a las personas contra el virus.
El anuncio se hizo un día después de que la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA, por sus siglas en inglés) concediera la autorización de uso de emergencia para las vacunas COVID-19 de ARNm actualizadas.
«Dada la disminución de la inmunidad de la población por la exposición previa al virus y por la vacunación anterior, animamos encarecidamente a quienes reúnan los requisitos a que consideren la posibilidad de recibir una vacuna COVID-19 actualizada para proporcionar una mejor protección contra las variantes que están circulando actualmente», declaró en un comunicado Peter Marks, director del Centro de Evaluación e Investigación de Productos Biológicos de la FDA.
Entre las vacunas de ARNm COVID-19 actualizadas están las fabricadas por Moderna y Pfizer-BioNTech. Según la agencia, estas vacunas se dirigirán a las variantes actualmente circulantes y proporcionarán una mejor protección contra la enfermedad grave por COVID-19.
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