Personas de Estados Unidos y de otros países donaron más de 1.5 millones de dólares para las víctimas del ataque del desfile de Navidad.
Las campañas en GoFundMe reunieron algo más de 1.5 millones de dólares hasta el jueves por la mañana, mientras que una campaña en GiveSendGo recaudó 1400 dólares.
Seis personas murieron a manos de un conductor que estrelló una camioneta todoterreno contra el desfile en Waukesha, Wisconsin, el 21 de noviembre. El conductor, identificado como Darrell Brooks, fue detenido, inculpado y se le impuso una fianza de 5 millones de dólares. Los documentos de acusación indican que se trata de un delincuente veterano que atacó intencionadamente el desfile con el vehículo.
Más de una cuarta parte de las donaciones se recaudaron en una campaña para la familia Sparks.
Jackson Sparks, de 8 años, murió a causa de las heridas que sufrió durante el ataque, anunció la familia el martes. Tucker Sparks, de 12 años, está en cuidados intensivos en el Hospital Infantil de Wisconsin.
Los padres del niño están junto a su cama mientras lloran la pérdida de Jackson, escribió su sobrina en GoFundMe. El dinero que la gente done ayudará a hacer frente a los crecientes gastos médicos mientras los padres faltan al trabajo, dijo.
La segunda recaudación de fondos más importante es para la banda de la escuela secundaria Waukesha West, que participaba en el desfile cuando el vehículo estrelló a la multitud.
Kali Granzow, director de la banda, dijo que los estudiantes de la banda se encontraban entre los heridos.
El dinero ayudará a pagar la atención médica, los nuevos instrumentos y los uniformes, «así como cualquier gasto adicional que puedan encontrar debido a este horrible evento», escribió Granzow en la página de recaudación de fondos.
Otras campañas se realizaron para ayudar a pagar la atención médica de Julia, una niña que sufrió un traumatismo cerebral tras ser golpeada, y de Jessalyn, otra niña que resultó gravemente herida, además de ayudar a financiar los funerales de los fallecidos, entre ellos Virginia Sorenson, de 79 años, y Jane Kulich, de 52.
Según una denuncia penal hecha pública esta semana, Brooks se negó a detener su Ford Escape rojo a pesar de los intentos de los oficiales de policía. Un detective recordó que el conductor pasó por una calle que habría sido una forma razonable de salir del desfile. En cambio, el conductor aumentó la velocidad del vehículo y giró directamente hacia los participantes del desfile.
«En ese momento, el oficial Butryn tuvo claro que se trataba de un acto intencionado para golpear y herir al mayor número de personas posible», declararon las autoridades.
Otro detective presenció cómo el todoterreno circulaba en zigzag. Un testigo que lo confirmó dijo a la policía que creía que las acciones del conductor indicaban «una intención directa de golpear al mayor número de participantes [posible] en el desfile».
Las cuentas de las redes sociales vinculadas a Brooks revelaron publicaciones que promueven la violencia contra los blancos y afirmaciones sobre el llamado privilegio blanco.
Brooks no habló durante su primera comparecencia ante el tribunal y no ha pagado la fianza.
La próxima audiencia está prevista para el 14 de enero de 2022.
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