HONOLULU—Un preso en Hawái condenado por el asesinato en 1994 de una vidente japonesa y su hijo fue asesinado en prisión, según informaron las autoridades.
El personal del centro penitenciario de Halawa, en Aiea, a las afueras de Honolulu, encontró a Raita Fukusaku, de 59 años, sangrando en el suelo de su celda con traumatismos en la cabeza y el cuello a primera hora del lunes, según el Departamento de Correccionales y Rehabilitación del estado.
«Se determinó que la víctima había sido agredida y apuñalada por su compañero de celda, un varón de 38 años», declaró la policía de Honolulu en un boletín de información pública.
El compañero de celda fue trasladado inmediatamente a una unidad de detención, según informó el departamento penitenciario.
Las autoridades seguían investigando el martes. La oficina del forense de Honolulu aún no había dado a conocer la causa de la muerte.
Fukusaku fue el primer ciudadano japonés extraditado a Estados Unidos y condenado por asesinato, informó Hawaii News Now.
Cumplía condena por dos delitos de asesinato en segundo grado.
Fue declarado culpable en 1995 de matar a Kototome Fujita y a su hijo Goro Fujita, según KITV, que informó que Kototome Fujita fue encontrada tiroteada en su ático y que su hijo fue hallado muerto en su auto en el estacionamiento de un hotel de Waikiki. El ático y el coche de Goro Fujita fueron incendiados.
Myles Breiner, exabogado de Fukusaku, dijo a KHON-TV que nunca tuvo problemas en los 30 años que llevaba en prisión.
«No estaba relacionado con las bandas, parecía estar por encima de todo eso. Se llevaba bien con todo el personal», dijo Breiner. «No estoy satisfecho con el hecho que esto haya ocurrido. Esto no debería haber ocurrido».
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo clic aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
