Muñeca Fuentes, la presidenta de Nicaraguan American Republican Alliance (NARA), una organización de nicaragüenses en el exilio, habló sobre el impacto que tendría dentro de Nicaragua la reciente liberación de prisioneros políticos por el régimen de Daniel Ortega.
El régimen de Nicaragua liberó de manera “unilateral” a 222 prisioneros políticos con la facilitación de Estados Unidos, informaron el jueves fuentes de la Casa Blanca y el Departamento de Estado.
“Las razones probablemente sean para negociar el levantamiento de sanciones”, dijo hoy Fuentes a NTD, medio afiliado a The Epoch Times en una entrevista. “Esto no ha nacido de la bondad de los dictadores”.
Con esta reciente liberación, Fuentes dijo, que el régimen de Ortega lo que busca es amedrentar al pueblo nicaragüense.
“Están creando más miedo entre el pueblo, tratan con esto callar a la gente porque les están dando el ejemplo, que si no te unís con ellos te vas de Nicaragua”, afirmó. “Están manejando a Nicaragua como que fuera una finca—una hacienda privada. [Donde] ellos [serían] los dueños, los patrones; y el pueblo los peones”.
El líder nicaragüense, Daniel Ortega, dijo este jueves que no estaban pidiendo a EE. UU. el levanto de sanciones, ni nada a cambio de la liberación de los prisioneros políticos.
Es algo que la presidenta de la alianza no cree que sea cierto.
“¡Absolutamente no! Esta gente no da puntada sin hilo”, dijo.“Ya sabemos que esta administración es muy conocida por su capacidad de congraciarse con los regímenes totalitarios como lo han venido haciendo con Venezuela”, refiriéndose a la administración Biden.
“La doble moral que lo que siempre buscan detrás es congraciarse con estos dictadores, como lo están haciendo también con Cuba, queriéndolos sacar de la lista de terroristas”, agregó. Y señaló que esto trae consecuencias.
Fuentes también considera que hay un sentimiento general entre el pueblo nicaragüense, y ese sentimiento lo describe como “agridulce”.
“Porque nos sentimos muy alegres que se les haya otorgado la libertad a 222 presos políticos, que la mayoría estaba injustamente arrestado. Sin embargo, vemos que se siguen violando los derechos humanos”.
Y recordó que la Declaración Universal de los Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en su artículo 15, menciona que a ninguna persona se le privará arbitrariamente de su nacionalidad, al igual que el artículo 20 de la Carta Magna del país.
Además, dentro de las personas liberadas y enviadas a EE. UU., Fuentes afirmó que se encontraban incluidas personas que estarían ligadas al sandinismo e incluso paramilitares.
“No todos los 222 que llegaron son héroes—ahí vienen muchos sandinistas infiltrados, ahí vienen incluso paramilitares que fueron parte de la operación Limpieza, que masacraron al pueblo en el 2018”, señaló, diciendo que esos sandinistas infiltrados en algún momento estuvieron en desacuerdo con Rosario Murillo, esposa de Ortega y por eso fueron encarcelados.
El 18 de abril de 2018 estallaron las protestas populares donde miles de nicaragüenses salieron a las calles a manifestarse en contra de unas controvertidas reformas a la seguridad social, que luego se convirtieron en una exigencia de renuncia de Ortega por su respuesta con una fuerte represión. Las protestas fueron calificadas como un intento de golpe de Estado por el régimen de Ortega.
Sandinistas infiltrados son un riesgo para EE. UU.
Muñeca Fuentes señala que el riesgo que corre EE. UU. tras la liberación de estos sandinistas infiltrados en su territorio es “muy grande”, explicó que como la administración Biden tiene una inclinación a la izquierda, los sandinistas “vienen a reforzar sus bases”.
Porque, según dijo, “no son simplemente izquierdosos por ideal o romanticismo, son criminales entrenados por los G2 cubanos”, refiriéndose al órgano de espionaje estatal cubano.
“Y eso es definitivamente un riesgo para la seguridad nacional de Estados Unidos”, señaló.
“Hay muchos que sí merecen estar libres y estar en este país, y que nosotros les acojamos y les ayudemos a empezar su vida de nuevo. Pero hay muchos que son criminales de profesión, sandinistas de cepa”, afirmó, de manera indistinta a la facción a la que pertenezcan. “Es un peligro enorme para este país”.
Entre los presos políticos excarcelados y enviados a EE. UU. por el régimen sandinista se encuentran Cristiana Chamorro, la aspirante a la presidencia de Nicaragua que tenía mayor probabilidad de derrotar a Daniel Ortega Ortega, y los exprecandidatos a la presidencia del país. Juan Sebastián Chamorro, Félix Maradiaga, además de los líderes estudiantiles Lesther Alemán y Max Jérez.
Con información de VOA.
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