El requisito de vacunación de emergencia para COVID-19 de la administración de Biden publicado hoy podría ampliarse en el futuro a los empleadores que tienen menos de 100 trabajadores.
La norma temporal de emergencia, emitida por la Administración de Salud y Seguridad Ocupacional (OSHA) del Departamento de Trabajo está programada para entrar en vigencia el viernes, se presenta como aplicable solo a empresas que tienen 100 o más empleados.
Pero OSHA está buscando comentarios públicos sobre ese aspecto de la norma, y en última instancia puede expandirse para incluir negocios más pequeños, dijo la agencia en el documento de 490 páginas.
OSHA dijo que está «solicitando comentarios de las partes interesadas e información adicional para determinar si se debe ajustar el alcance del ETS», o la norma de emergencia, «para dirigirse a los empleadores más pequeños en el futuro».
La agencia está buscando información de los empleadores, indicó (pdf).
“OSHA busca información sobre la capacidad de los empleadores con menos de 100 empleados para implementar programas de vacunación y/o pruebas de COVID-19”, dijo.
“¿Ha instituido normas de vacunación (con o sin alternativas), o requisitos para las pruebas de COVID-19 regulares o el uso de mascarillas? ¿Cuáles han sido los beneficios de su enfoque? ¿Qué desafíos ha tenido o podría prever en la implementación de tales programas? ¿Hay algo específico de su industria o del tamaño de su empresa que presente obstáculos particulares para implementar los requisitos de esta norma? ¿Cuánto tiempo tomaría, en qué tipos de costos incurriría y cuánto le costaría implementar tales requisitos?».
La norma entra en vigencia el viernes, pero también sirve como una propuesta bajo la Ley de Seguridad y Salud Ocupacional. Eso significa que OSHA está buscando retroalimentación y puede ajustar la versión finalizada con base en los comentarios.
La norma obliga a muchos empleadores privados a exigir la vacuna anti-COVID a sus trabajadores o a que se sometan a pruebas de COVID-19 de forma regular, al menos una vez a la semana.
Los trabajadores que se nieguen a proporcionar pruebas deben ser obligados a usar mascarillas.
La fecha límite para cumplir la orden es el 4 de enero de 2022.
Los funcionarios de la administración afirman que OSHA tiene la autoridad para promulgar tal regla porque la pandemia de COVID-19 representa una emergencia y la agencia recibe poderes a través de la Ley OSH.
Los críticos dicen que la regulación es una extralimitación del gobierno y que está fuera de la autoridad de OSHA. Decenas de fiscales generales han prometido demandar la norma y los congresistas republicanos se están preparando para intentar anularla.
Las sanciones por incumplimiento incluyen una multa de USD 14,000 por una sola infracción, dijo un funcionario de la administración a los periodistas en una llamada el miércoles por la noche.
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