Los dos fiscales que dirigen la investigación penal del fiscal del distrito de Manhattan sobre la Organización Trump renunciaron abruptamente el miércoles.
Las renuncias de los fiscales Carey Dunne y Mark Pomerantz fueron confirmadas por una portavoz del fiscal Alvin Bragg.
«Estamos agradecidos por su servicio», dijo la portavoz Danielle Filson, sin dar más detalles. Filson se negó a hacer más comentarios, diciendo que la investigación está en curso.
El New York Times, citando fuentes anónimas, reportó que los fiscales renunciaron después de que Bragg planteara dudas sobre la continuación de un caso contra el expresidente Donald Trump.
The Epoch Times no ha podido verificar de forma independiente los reportes. Dunne y Pomerantz no respondieron inmediatamente a las solicitudes de comentarios de The Epoch Times.
La investigación de la Oficina del fiscal de distrito condujo a la presentación de cargos por fraude fiscal el pasado mes de julio contra la empresa de Trump, la Organización Trump, y su exjefe de finanzas, Allen Weisselberg. Trump no ha sido acusado en el caso.
Weisselberg fue acusado de cobrar más de 1.7 millones de dólares en compensaciones fuera de los libros, incluyendo el alquiler de un apartamento, los pagos de un auto y la matrícula de una escuela. Él y la empresa se han declarado inocentes.
Una de las fuentes anónimas dijo a The New York Times que después de que Bragg señalara que tenía dudas en el caso, Dunne y Pomerantz pospusieron el mes pasado el interrogatorio de al menos un testigo ante el gran jurado.
Los motivos de las presuntas dudas de Bragg en el caso no están claros.
Esto se produce después de que el juez del Tribunal Supremo de Nueva York Arthur Engoron dictaminara el 18 de febrero que Trump y dos de sus hijos, Ivanka Trump y Donald Trump Jr., deben declarar en otra investigación que lleva a cabo la fiscal de Nueva York Letitia James.
Los abogados de Trump argumentaron que la investigación viola las constituciones de Estados Unidos y de Nueva York y, por tanto, las citaciones emitidas contra él y sus hijos deben ser anuladas.
Engoron dijo que ha considerado los argumentos «y los encuentra infructuosos y/o no determinantes», añadiendo que los tres deben presentarse a declarar en un plazo de 21 días a partir de la orden.
Sin embargo, Trump y sus dos hijos pueden invocar sus derechos de la Quinta Enmienda, señaló Engoron.
La citación emitida por la oficina de James también ordena a Trump entregar documentos e información en un plazo de 14 días.
«No se permitirá que nadie se interponga en el camino de la búsqueda de la justicia, no importa lo poderoso que sea. Nadie está por encima de la ley», dijo James en un comunicado.
Trump dijo que James lo está «enjuiciando selectivamente a él y a su familia».
«Después de ver millones de páginas de documentos durante muchos años, salen con un caso de ‘beneficios marginales’ en un coche, un apartamento y en la educación de los nietos», dijo en un comunicado. «Está haciendo todo lo que está a su corrupta discreción para interferir en mis relaciones comerciales, y en el proceso político».
Con información de The Associated Press.
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