La representante María Elvira Salazar (R-Fla.) presentó un proyecto de ley el miércoles para evitar que cualquier gobierno estadounidense retire nuevamente a Cuba de la lista de países patrocinadores del terrorismo, hasta que el régimen castrista cumpla con ciertas condiciones.
La ley, llamada «Fighting Oppression until the Reign of Castro Ends» («Luchando contra la Opresión hasta que el Dominio de Castro Termine«), o FORCE, “impide que eliminen a la brutal dictadura de Castro de la lista de estados patrocinadores de terrorismo hasta que cumplan con los requisitos de la Sección 205 de la ley LIBERTAD”. Salazar ha presentado este proyecto de ley tres días después de que el Departamento de Estado anunciara que incluyó nuevamente a Cuba como «Estado Patrocinador del Terrorismo».
«Este proyecto de ley le pide a cualquier administración, sea republicana o demócrata, que no puede quitar a Cuba de la lista de países terroristas hasta que no se porten bien», dijo Salazar en un posteo de Facebook el 13 de enero.
La ley de Libertad y Solidaridad Democrática de Cuba (LIBERTAD) fue aprobada en 1994, y la Sección 205 establece que, para que Cuba sea considerado de transición o elegido democráticamente, debe cumplir con liberar a todos sus presos políticos y permitir que las organizaciones internacionales de derechos humanos competentes investiguen las prisiones cubanas; dejar el régimen castrista por un sistema que garantice el derecho del pueblo cubano a expresarse libremente; y llevar a cabo elecciones libres y justas.
«El proyecto de ley FORCE responsabiliza al régimen de Castro de albergar a fugitivos del sistema judicial de EE. UU., respaldar a los regímenes de Maduro y Ortega en Venezuela y Nicaragua respectivamente, y cometer actos violentos de terrorismo en nuestro hemisferio», dijo Salazar en el documento.
Este es el primer proyecto de ley presentado por la representante republicana, quien venció a la entonces representante demócrata Donna Shalala en las pasadas elecciones del 3 de noviembre.
Los copatrocinadores del proyecto son los representantes Nicole Malliotakis (R-N.Y.), Mario Diaz-Balart (R-Fla.), Carlos Gimenez (R-Fla.), Neal Dunn (R-Fla.), Alexander Mooney (R-WV), Michael Waltz (R-Fla.), Stephanie Bice (R-OK), y Kat Cammack (R-Fla.).
El representante Gimenez dijo que se debe mantener una postura política de presión contra el régimen de Cuba, porque desde sus inicios el régimen castrista apoya el terrorismo contra EE. UU. y «sirve como epicentro del socialismo en la región».
«La infiltración comunista en Venezuela y Nicaragua, así como el financiamiento y entrenamiento de las guerrillas comunistas en Colombia, surgen de la visión sobre política global del régimen de Castro», añadió el congresista republicano.
El pasado lunes, el Departamento de Estado designó nuevamente a Cuba como «Estado Patrocinador del Terrorismo», luego que la administración de Obama eliminara al país de la lista en 2014.
“Con esta acción, una vez más responsabilizaremos al gobierno de Cuba y enviaremos un claro mensaje: el régimen de Castro debe poner fin a su apoyo al terrorismo internacional y a la subversión de la justicia estadounidense”, dijo el secretario de Estado Mike Pompeo.
Con esta designación, se sancionará a cualquiera que comercie con el régimen castrista, se restringe la ayuda exterior de EE.UU., y se prohíbe las exportaciones y ventas de defensa.
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