Después de que el expresidente Donald Trump informó que el Departamento de Justicia (DOJ) lo está indagando como parte de su investigación del 6 de enero, los republicanos calificaron el hecho como una trampa política, mientras que los demócratas elogiaron la medida.
El Sr. Trump dijo que en una carta del domingo recibida del abogado especial Jack Smith, él le dio cuatro días para presentarse ante un gran jurado.
El martes, en un mensaje publicado en su plataforma de redes sociales, Truth Social, el expresidente sugirió que en breve plazo podría significar que sería arrestado y se le imputarían cargos en su contra.
La nueva imputación de cargos ocurre después de que el Sr. Smith ya procesara al Sr. Trump de 37 cargos en su contra por manejo indebido de documentos clasificados.
Los republicanos calificaron la medida de una movida política, citando el reciente aumento del Sr. Trump en las encuestas, varias de las cuales muestran que el expresidente tiene una ventaja de varios puntos sobre el presidente Joe Biden.
«Si se dan cuenta, recientemente el presidente Trump subió en las encuestas, y de hecho iba superando al presidente Biden para la reelección», dijo a los periodistas el presidente de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy (R-Calif.).
«Entonces, ¿qué hacen ahora? Arman al gobierno para ir tras su oponente número uno. Esto es una y otra vez».
«Creo que el público estadounidense está cansado de esto», dijo el Sr. McCarthy. «Ellos quieren tener una justicia igualitaria, y la idea de que utilicen esto para ir por los que políticamente no están de acuerdo con ellos es errónea».
El representante Dan Crenshaw (R-Texas) declaró a The Epoch Times que siente «cero simpatía» por cualquiera que haya participado en la irrupción del 6 de enero en el Capitolio. Pero también sugirió que las posibles vías legales para el DOJ, como un cargo de incitación a la violencia, tiene un «estándar bastante alto».
«No tengo conocimiento de ninguna prueba que sugiera que lo cumpla», declaró el Sr. Crenshaw. «Así que a ver hasta dónde llega esto».
El representante Kevin Hern (R-Okla.) se unió a otros republicanos para calificar la medida de una movida política.
«No creo que haya ningún misterio de que cada vez que alguien tenga la oportunidad de ir tras el expresidente, el nominado presidencial, el favorito presidencial, lo van a hacer», dijo el Sr. Hern. «Nunca en nuestra historia hemos visto que se persiga tanto como el Departamento de Justicia lo hace tras el presidente Trump. Así que (…) no pienso que haya habido ninguna conmoción».
«Todo lo que está haciendo es envalentonar sus números», agregó el Sr. Hern.
«Es un [improperio] absoluto», indicó por su parte la representante Marjorie Taylor Greene (R-Ga.).
«La única manera que tienen los demócratas de derrotar al presidente Trump es arrestarlo, difamarlo, acusarlo de cargos ridículos, todo para encubrir los crímenes de Joe Biden. Los crímenes de Hunter Biden», dijo Greene.
«Es increíble», añadió Greene. «Es difícil incluso reconocer que este es nuestro país. El pueblo estadounidense va a estar furioso. Lo que Jack Smith está haciendo es convertir el gobierno en un arma».
El representante Byron Donalds ( R-Fla.) estuvo de acuerdo.
«Una vez más, el Departamento de Justicia está jugando a la política, y me parece interesante que se muevan con tanta rapidez en todo esto, pero ignoren a Hunter Biden», dijo el Sr. Donalds. «No me parece divertido, me parece muy hipócrita. Ese es uno de los principales problemas que tenemos con el Departamento de Justicia».
Tras el anuncio, el representante Matt Gaetz (R-Fla.) propuso una ley para desfinanciar la investigación de Smith.
«Yo creo que es bastante obvio para el pueblo estadounidense que la administración Biden está armada», declaró Richard Grenell, exdirector de inteligencia nacional en la administración Trump. «He visto todas y cada una de las agencias gubernamentales que pueden [utilizar] para detener la candidatura del presidente Trump».
También expresó su preocupación de que, a través de la focalización en el Sr. Trump, Estados Unidos estaba perdiendo su autoridad moral para condenar tal conducta en otras naciones menos desarrolladas.
«Nadie está por encima de la ley»
Los demócratas, por el contrario, elogiaron la escalada de acciones legales contra Trump.
El senador Raphael Warnock (D-Ga.), en un estribillo ahora común para los demócratas en asuntos relacionados con el señor Trump, dijo a The Epoch Times: «Nadie está por encima de la ley».
La senadora Debbie Stabenow (D-Mich.) dijo que «no está sorprendida».
Presionada más, la Sra. Stabenow declaró que no está sorprendida «por lo que él hizo el 6 de enero como iniciativa para potencialmente derrocar al gobierno».
«Creo absolutamente que deberíamos investigar lo que (…) Trump ha hecho. Quiero decir, esto es real. Los republicanos quieren inventar algunas investigaciones irreales. Pero esto es real, y creo que es importante», indicó la representante Jan Schakowsky (D-Ill.).
Otros fueron más ambiguos, diciendo que lo dejarían en manos del proceso legal.
«Debido a que ejerzo la abogacía, soy un gran creyente en dejar que el proceso siga su curso, por lo que normalmente no tengo comentarios sobre (…) los pasos a lo largo del camino», declaró el senador Tim Kaine (D-Va.) absteniéndose de comentar.
«No soy abogado. No soy fiscal. No soy juez», dijo a su vez el senador Sherrod Brown (D-Ohio) añadiendo que el sistema judicial hará lo que tenga que hacer.
Con la contribución de Ivan Pentchoukov.
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