Los republicanos de Georgia instaron el viernes a un tribunal de apelaciones a ordenar inmediatamente a los funcionarios del estado que hagan coincidir las firmas de los votos por correo mientras se realizan las elecciones de segunda vuelta del Senado.
En una moción presentada ante el Tribunal de Apelación del Undécimo Circuito de EE. UU., los republicanos dijeron que buscan remediar las «políticas inconstitucionales, arbitrarias e incoherentes de Georgia y la aplicación del proceso de coincidencia de firmas para los votos en ausencia, antes de que esas boletas sean procesadas».
El Partido Republicano de Georgia, los apelantes, pidieron al tribunal de apelaciones que ordenara que todas las boletas para votar en ausencia permanecieran sin abrir en espera de la apelación.
Eso garantizaría que las boletas por correo no se separen de los sobres de correo, que tienen información sobre la firma, y que se separen y almacenen de manera segura hasta que se revise la apelación.
La solución que se busca es similar a la que concedió el juez de la Corte Suprema Samuel Alito el mes pasado en un caso que los republicanos presentaron en Pensilvania contra funcionarios electorales, señalaron los apelantes.
Sin una concesión inmediata de la solicitud, los republicanos dijeron, «la integridad y fiabilidad del proceso para determinar válidamente contadas las boletas en esta crítica segunda vuelta electoral se verá comprometida».
Los senadores Kelly Loeffler (R-Ga.) y David Perdue (R-Ga.), y el Comité Nacional Republicano del Senado se unieron al partido republicano estatal para presentar el caso a principios de este mes contra el secretario de Estado de Georgia Brad Raffensperger, republicano, y los miembros de la Junta Electoral Estatal.
Loeffler y Perdue se enfrentan a contiendas de reelección tras no haber recibido la mayoría de los votos en sus respectivas carreras en las elecciones generales.
Los funcionarios electorales pueden comenzar a abrir las boletas de ausente emitidas para las elecciones al Senado el 21 de diciembre, aunque oficialmente no se realicen hasta el 5 de enero de 2021.
Según los datos de los funcionarios estatales, alrededor de 1.2 millones de residentes de Georgia solicitaron boletas de ausente para las segundas vueltas. Más de 1.1 millones de personas han votado por correo o en persona hasta el viernes.
La apelación fue presentada un día después de que la jueza Eleanor Louise Ross de la Corte de Distrito de EE. UU. para el Distrito Norte de Georgia dictó sentencia contra los apelantes, negándoles la compensación solicitada. Esa fue una de las dos demandas desechadas el jueves.
Ross, nombrada por Obama, calificó las preocupaciones sobre el fraude electoral como «demasiado especulativas».
Raffensperger y los funcionarios de su oficina se han enfrentado repetidamente con sus colegas republicanos en el estado, junto con Trump y su campaña, sobre cómo se llevaron a cabo las elecciones presidenciales. Han desestimado las acusaciones de fraude y han dicho que las elecciones se desarrollaron sin problemas.
Raffensperger anunció esta semana que Georgia llevaría a cabo una verificación de las firmas en los votos por correo en todo el estado.
El funcionario electoral dijo a los periodistas en una conferencia de prensa que la medida forma parte del esfuerzo de «restaurar la fe en las elecciones que ha sido socavada por el tsunami de desinformación».
«Francamente, no ha habido ningún fundamento de investigación para ello. En este momento se ha convertido en un empecinamiento de desinformación, ahora nos sentimos obligados a restaurar la confianza en el proceso haciéndolo ahora», añadió Gabriel Sterling, que trabaja en la oficina de Raffensperger como gerente de implementación del sistema de votación del estado.
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