Estados Unidos continuará limitando los viajes no esenciales de Canadá a Estados Unidos a través de puertos de entrada terrestres o del servicio de ferry, confirmó el miércoles el Servicio de Aduanas y Protección de Fronteras de EE.UU. (CBP).
«Estas restricciones entrarán en vigencia a las 12 a.m., hora del este (EDT) del 23 de junio de 2020 y permanecerán vigentes hasta las 11:59 p.m. EDT del 21 de julio de 2020”, dijo CBP en una publicación del Registro Federal.
La restricción de viaje se anunció inicialmente el 24 de marzo, a causa del brote del virus PCCh (Partido Comunista Chino).
El secretario interino del Departamento de Seguridad Nacional, Chad Wolf, decidió continuar con la restricción de viajes, porque la transmisión y propagación continua de COVID-19, la enfermedad causada por el virus PCCh, entre Estados Unidos y Canadá, representa una «amenaza específica para la vida humana o los intereses nacionales», declaró la agencia.
La extensión fue anunciada por el gobierno canadiense el 16 de junio.
El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, anunció que las restricciones de viaje en la frontera se mantendrán vigentes hasta el 21 de julio, incluso cuando las dos naciones continúen sus procesos de reapertura.
«Esta es una decisión importante que mantendrá a las personas en nuestros dos países seguras», dijo Trudeau.
De acuerdo con la regla publicada por el CBP, los ciudadanos estadounidenses y los titulares de la tarjeta verde que regresan a Estados Unidos pueden usar la frontera. Las personas que viajan con fines médicos, para asistir a instituciones educativas, para trabajar en Estados Unidos, para alguna respuesta de emergencia y para fines de salud pública no están sujetas a las restricciones.
También se permiten los viajes relacionados con el comercio transfronterizo legal, los asuntos gubernamentales y diplomáticos.
Según los datos gubernamentales recopilados por Our World in Data, las nuevas muertes por el virus del PCCh en Estados Unidos han pasado el pico y muestran una clara tendencia a la baja, aunque los nuevos casos han crecido lentamente en las últimas semanas.
La administración Trump atribuyó el aumento de los nuevos casos a la aplicación de un número mayor de pruebas.
Hablando en una mesa redonda de la Casa Blanca el 15 de junio, el vicepresidente Mike Pence dijo que el aumento de los casos de infecciones por COVID-19, en algunos estados, fue causado por un «aumento dramático en las pruebas».
“Nuestro equipo trabajó con los gobernadores la semana pasada. Estamos analizando cuidadosamente esos nuevos casos, y realmente creemos que la gran mayoría de los nuevos casos son un reflejo, como usted dijo, de un aumento dramático en las pruebas», dijo.
Jack Phillips y Tom Ozimek contribuyeron al informe.
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