Los reyes de España llegaron este domingo a Buenos Aires en su primera visita de Estado a Argentina, un viaje que iniciaron con anécdota al demorar casi una hora su bajada del avión por la ausencia en el aeropuerto de una escalera adecuada.
El Airbus 310 de la Fuerza Aérea Española en el que se desplazaron a la capital argentina aterrizó en el aeroparque metropolitano Jorge Newbery poco antes de las 21:00 horas local.
Se trata de un aeropuerto ubicado en la misma ciudad de Buenos Aires y en el que habitualmente operan aviones de menor altura y envergadura que los que lo hacen en el aeropuerto internacional de Ezeiza, situado a unos 35 kilómetros al sudoeste de la capital argentina.
La cercanía del aeroparque al centro de la ciudad fue uno de los motivos por los que se decidió que el avión de los reyes aterrizase en su pista.
El aparato rodó por la pista hasta el lugar en el que sus ocupantes tenían que descender, y hasta la puerta del avión se acercó una escalera de bajada.
Sin embargo, la escalera no alcanzaba la altura de la puerta y fue retirada del avión a la espera de una solución que casi tres cuartos de hora después no se había encontrado.
En consecuencia, a las 21:45 horas los reyes y el resto de la delegación que les acompaña permanecen en el interior del aparato sin poder descender del mismo.
A pie de pista les esperan el ministro de Asuntos Exteriores español, José Borrell (quien había viajado previamente a Buenos Aires para protagonizar diversos actos) y su homólogo argentino, Jorge Faurie.
También están presentes, entre otros, el embajador español en Buenos Aires, Javier Santodomingo, y el de Argentina en Madrid, Ramón Puerta.
Habitualmente los aviones de grandes dimensiones aterrizan en el aeropuerto de Ezeiza, y en aeroparque operan otros más pequeños.
***
Historias de convicción
Trabajó para la mafia y fue un adicto durante décadas, al fin se libera con ayuda de la meditación
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.