La campaña del senador de Florida, Rick Scott, para convertirse en el próximo líder de la mayoría del Senado está surgiendo con una avalancha de apoyos de colegas que normalmente guardan silencio sobre a quién respaldarían para el puesto hasta que se emitan los votos secretos.
Scott, el senador John Cornyn, de Texas, y el senador John Thune, de Dakota del Sur, compiten por suceder al senador Mitch McConnell, de Kentucky, el líder republicano del Senado que más tiempo lleva en el cargo, desde 2007, pasando por senados controlados por ambos partidos.
Scott disputó el puesto a McConnell hace dos años, pero solo obtuvo 11 votos. Cornyn fue ayudante de McConnell durante el primer mandato del presidente Donald Trump en la Casa Blanca. Thune fue ayudante de McConnell durante el mandato del presidente Joe Biden en el Despacho Oval.
La oleada de apoyos del republicano de Florida durante el fin de semana provino de sus colegas en el Senado y de importantes respaldos inesperados fuera del Congreso.
El senador Marco Rubio, colega de Scott en Florida, posteó su apoyo en X el domingo, al igual que el exaspirante presidencial del Partido Republicano Vivek Ramaswamy.
«Lo dije a principios de este año y lo diré de nuevo: @ScottforFlorida para Líder de la Mayoría del Senado», dijo Ramaswamy.
El senador Rand Paul de Kentucky, a quien algunos libertarios animaron a buscar el puesto más alto, anunció su apoyo a Scott en X el sábado. «Yo apoyaré a Rick Scott para líder de la mayoría del Senado. El status quo de déficits anuales de 2 billones de dólares es insostenible», dijo Paul.
También respaldó a Scott el senador Bill Hagerty (R-Tenn.), quien el sábado escribió en X que lo hacía porque «cualquier líder de esta nueva mayoría debe ser capaz de trabajar mano a mano con el presidente Trump para avanzar en su agenda America First. El Senado debe inclinarse por avanzar en esta agenda».
«Es por eso que quiero ver a un líder de la mayoría del Senado que pueda unirse a mí para adoptar la agenda de Trump, que unificará a los republicanos del Senado», dijo Hagerty.
Quizás el respaldo más inesperado a Scott vino de Robert F. Kennedy Jr., quien escribió en X Sunday que «sin Rick Scott, toda la agenda reformista de Trump se tambalea». Un ayudante de Scott dijo que Kennedy y el senador de Florida no tienen una larga relación.
El propietario de X, Elon Musk, también se convirtió en un factor en la carrera por el liderazgo del Senado, respaldando a Scott y publicando una encuesta en su plataforma el domingo, preguntando al público a cuál de los tres candidatos favorecían. Scott llevaba una cómoda ventaja a última hora del domingo, con el 67% de los más de 767,000 votos, frente al 5% de Thune y el 6% de Cornyn. «Otros» obtuvo un 22% de apoyo.
Cornyn, que fue el primero de los tres candidatos en declararse públicamente, también recibió su primer apoyo público de uno de los conservadores más visibles y elocuentes del Senado, el senador Josh Hawley (R-Mo.), que citó la destreza del republicano de Texas para recaudar fondos.
En una indicación de la naturaleza profundamente «privilegiada» de estas contiendas por el liderazgo del Congreso, Hawley emitió su apoyo primero a través de una declaración a Punchbowl News, un boletín político centrado en el Congreso y la Casa Blanca.
Cornyn se enfrenta a una oposición significativa por parte de activistas cristianos conservadores y evangélicos, según un exlíder de uno de esos grupos. Hablando en segundo plano, el líder dijo a The Epoch Times que «Cornyn protegió al establishment cuando era presidente del comité de campaña senatorial que apoyaba a [el entonces gobernador de Florida] Charlie Crist frente a Rubio» en las primarias senatoriales del Partido Republicano del estado en 2010.
Un alto asesor del Senado, que habló bajo condición de anonimato, dijo a The Epoch Times, sin embargo, que Rubio apoyó posteriormente a Cornyn, que fue reelegido por unanimidad para presidir el comité durante otro ciclo de campaña.
Posteriormente, Crist abandonó el Partido Republicano y perdió una candidatura en 2022 para otro mandato en la Cámara de Representantes del estado de Florida como demócrata, mientras continuaba una campaña simultánea para gobernador contra el gobernador republicano Ron DeSantis, que ganó un segundo mandato al derrotar a Crist por 19 puntos porcentuales.
Thune está luchando contra una oposición similar, agregó asesor, quien criticó al legislador por no ser un defensor de las causas conservadoras.
Un portavoz de Thune dijo a The Epoch Times que la afirmación es «inequívocamente falsa».
Trump se ha mantenido callado sobre con quién del trío republicano del Senado preferiría trabajar como líder de la mayoría del Senado en el 119º Congreso.
Trump sí publicó el domingo en Truth Social un par de sus exigencias para quien gane las elecciones del miércoles. El jefe del Ejecutivo entrante dijo que espera que el nuevo líder apoye la agilización de los Nombramientos por Receso, «sin los cuales no podremos conseguir que la gente sea confirmada a tiempo».
Durante el tercer y cuarto año de su primer mandato, cuando los demócratas controlaban ambas cámaras del Congreso, las elecciones de Trump para cubrir las vacantes en el poder ejecutivo creadas por despidos o dimisiones se retrasaron a menudo.
«A veces las votaciones pueden tardar dos años, o más», dijo Trump en su posteo de Truth Social. «Esto es lo que hicieron hace cuatro años, y no podemos permitir que vuelva a ocurrir. Necesitamos que se cubran los puestos ¡INMEDIATAMENTE!».
También dijo que la sesión Lame Duckdel Congreso, que regresa a la capital de la nación el martes, no debería confirmar más nombramientos judiciales de Biden.
¿El vicepresidente como líder del Senado?
A medida que las perspectivas de Scott avanzaban durante el fin de semana, el puesto de liderazgo abierto también dio lugar a debates sobre la posibilidad de un nuevo posicionamiento radical del vicepresidente electo, JD Vance, cuando se convierta en el presidente del Senado.
Vance renunciará a su escaño en el Senado por Ohio antes de tomar posesión en enero como vicepresidente del país.
Si bien el cargo de presidente del Senado ha cobrado importancia en los últimos años, en gran parte debido a que dirime los empates en las votaciones del Senado, el senador Mike Lee (R-Utah) planteó el viernes la idea de que Vance ejerza también como líder de la mayoría del Senado.
En una conversación con Charlie Kirk, de Turning Point, Lee señaló que, según el reglamento del Senado, el presidente es potencialmente el cargo más poderoso de la Cámara Alta.
Cuando Kirk mencionó en el programa de la personalidad de los medios digitales Glen Beck la observación que Lee le había hecho, Beck expresó su apoyo a la idea de que Vance sirviera como líder de la mayoría del Senado, diciendo: «Estoy enamorado de eso (…) JD sería fantástico».
Kirk señaló que habría precedentes de que Vance asumiera ambas funciones, ya que John Adams fue líder de la mayoría del Senado y presidente del mismo al tiempo que ejercía como primer vicepresidente de la nación bajo la presidencia de George Washington.
Lee declaró a The Epoch Times el domingo que estaba sorprendido por la respuesta a su comentario, pero, dijo, «es una idea que he tenido durante mucho tiempo. Durante la mayor parte del tiempo que he estado en el Senado, he pensado que el cargo de vicepresidente estaba probablemente infrautilizado por los presidentes».
El republicano de Utah indicó que publicó un posteo en X a última hora del viernes para aclarar su observación.
«Lo que intentaba decir no es que él sería el líder electo de la mayoría per se, sino que cualquier vicepresidente, especialmente uno del mismo partido que controla el Senado, podría acabar siendo el líder de facto del partido mayoritario», dijo Lee a The Epoch Times.
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