El Comité Nacional Republicano (RNC) y el Partido Republicano de Georgia presentaron una demanda ante el estado exigiendo que se conceda a los observadores electorales republicanos el debido acceso legal durante las próximas elecciones para Senado en Georgia, el 5 de enero de 2021.
«Las leyes deben ser seguidas para que los votantes puedan tener confianza en los resultados», dijo la presidenta del RNC, Ronna McDaniel, en una declaración. «Me complace anunciar que el RNC y [los republicanos de Georgia] presentaron una demanda exigiendo a los funcionarios electorales de Georgia, para que sigan las leyes de sus libros en lo que respecta a los observadores electorales y los buzones de votos».
La demanda busca la aplicación de «dos facetas vitales del Código Electoral de Georgia que rigen (1) los derechos de los observadores electorales debidamente designados y (2) las salvaguardias estatutarias que asisten al uso de los ‘buzones’ como método de votación en ausencia».
La demanda se presentó en el Tribunal Superior del condado de Fulton contra la Junta Electoral Estatal y otros funcionarios de la Junta, entre ellos Brad Raffensperger, el secretario de Estado de Georgia y el presidente de la Junta.
Observadores electorales
El RNC y el Partido Republicano de Georgia alegaron que los derechos de los observadores electorales se vieron limitados en muchos lugares de votación y contabilización en todo el estado durante las elecciones del 3 de noviembre, así como durante el recuento posterior.
«Según la información y la creencia, se reanudarán las mismas prácticas ilícitas, o sustancialmente similares, en relación con la inminente segunda vuelta de las elecciones el 5 de enero de 2021», dice el expediente. «En su calidad de funcionarios reguladores primarios y superordinados encargados de la supervisión de las elecciones, los demandados están obligados por ley a garantizar que los superintendentes y registradores de los condados y municipios reciban una instrucción adecuada y legal sobre los derechos de los observadores electorales y no apliquen políticas o procedimientos que menoscaben su capacidad para observar de manera plena y significativa el proceso electoral».
La demanda dice que en las elecciones del 3 de noviembre a los observadores electorales designados por el Partido Republicano de Georgia se les «negó una oportunidad significativa de observar» cualquier actividad de procesamiento o contabilización de votos. En la demanda se citan 14 declaraciones juradas separadas presentadas por observadores electorales que alegaron que el personal del condado los alejó a gran distancia, o los colocó en una sala diferente de los empleados que realizaban el recuento o la contabilización de los votos, de manera que se les impidió observar de manera significativa la acción.
Los demandantes solicitaron una declaración, entre otros puntos, de que se permita a cada observador electoral desplazarse entre los puestos de observación y estar en lugares que les permitan verificar que «todos los aspectos de todo el proceso de votación y contabilización (incluidos, entre otros, la emisión, presentación, verificación, curación, duplicación, contabilización y recuento de los votos) se llevan a cabo de manera correcta, exacta y legal».
En la demanda también se pide una medida cautelar o mandato judicial que ordene a Raffensberger que «prontamente y a más tardar» el 5 de enero de 2021, «prepare y difunda a los registradores y superintendentes de los condados materiales de capacitación (…) relativos a los derechos estatutarios de los observadores electorales tan pronto como sea posible para asegurar su cumplimiento durante el proceso de elección de la segunda vuelta».
«Regla del buzón»
Los buzones nunca se utilizaron en ninguna elección de Georgia antes de 2020 y «ninguna disposición» de la ley de Georgia que rige el voto en ausencia en el Estado «hace referencia o contempla el concepto de ‘buzones’ como método de devolución de votos en ausencia», señalaron el RNC y el Partido Republicano de Georgia en su reclamación.
Los demandantes dijeron que la Junta Electoral Estatal «promulgó» alrededor de abril de 2020 lo que se conoce como la «Regla de los buzones», que autoriza a los registradores del condado «a establecer uno o más lugares de buzones» como forma de que los votantes envíen sus boletas a los registradores del condado. La Regla de los Buzones también exige la vigilancia continua mediante grabación de vídeo de cada ubicación de los buzones, señalaron los demandantes.
Los demandantes alegan que los demandados parecen permitir que las boletas para votar en ausencia se depositen en buzones a lo largo de todas las horas del día, todos los días, incluso fuera del horario de trabajo habitual de la oficina de elecciones del condado. También alegan que la Junta Electoral del Estado y sus funcionarios «no adoptan la posición de que los demandantes tienen derecho a acceder o ver la vigilancia por vídeo de las ubicaciones de los buzones en tiempo real, o tan cerca del tiempo real como sea posible».
«Si la Regla del Buzón y en su extensión se interpreta de esa manera, los demandantes tienen derecho a una declaración (…) de que la Regla del Buzón no es válida», dice la presentación.
El RNC y el Partido Republicano de Georgia solicitan una declaración de que la Regla del Buzón solo es válida si permite la entrega de boletas para votar en ausencia «solo durante el horario normal de trabajo» y «exige que las imágenes de vigilancia continua por vídeo de todas las ubicaciones de los buzones en el estado estén disponibles en tiempo real o casi en tiempo real», o que se pongan rápidamente a disposición del solicitante cuando éste las solicite sin costo alguno o a un costo muy bajo.
Los demandantes solicitan una orden para exigir que los demandados apliquen y hagan cumplir estos requisitos. También solicitan un mandato judicial o una orden para exigir que el Secretario de Estado prepare los registros del condado antes del 5 de enero de 2021 sobre estos puntos.
Los senadores de Georgia. Kelly Loeffler (R-Ga.) y David Perdue (R-Ga.), que se enfrentan a carreras electorales separadas el 5 de enero de 2021, pidieron a Raffensperger el mes pasado que dimitiera por «la mala gestión y la falta de transparencia» en el proceso de recuento». Raffensperger respondió: «Eso no va a suceder. Los votantes de Georgia me contrataron, y los votantes serán los que me despidan».
El presidente Donald Trump recientemente instó al gobernador de Georgia, Brian Kemp, a permitir la verificación de las firmas en las boletas, argumentando que la medida demostraría que él había ganado el estado. Raffensperger dijo que tal auditoría no es necesaria. El proceso consistiría en cotejar las firmas de las papeletas con las firmas de los sobres en los que llegaron, o comparar las firmas de los sobres con las firmas de otros registros de registro de votantes.
Con información de Zachary Stieber.
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