Después de sufrir una derrota el martes por la noche, el senador Bernie Sanders (I-Vt.) dijo que se mantiene en la carrera demócrata de 2020 y participará en un debate el domingo contra el exvicepresidente Joe Biden en Arizona.
«Donald Trump debe ser derrotado y haré todo lo que esté en mi poder para que eso suceda», dijo en una conferencia de prensa en Burlington, Vermont, y añadió: «Espero con ansias el debate en Arizona con mi amigo, Joe Biden».
Sanders señaló que aunque tiene un importante apoyo de base entre los demócratas y que muchos de ellos apoyan sus propuestas, «Estamos perdiendo el debate sobre la elegibilidad».
Explicando más detalladamente, el senador de Vermont dijo que escuchó declaraciones de los estadounidenses de su campaña que están de acuerdo con sus ideas progresistas pero que consideran que Biden es el candidato más «elegible» contra el presidente Donald Trump en noviembre.
Antes del debate de Arizona, Sanders adelantó varias preguntas que le gustaría hacerle a Biden. Incluyen el plan de Biden para el cuidado de la salud, la deuda universitaria, la inmigración, y el sistema penitenciario.
«¿Qué vas a hacer por la gente trabajadora de este país?» preguntó.
El debate del domingo solo incluirá a Sanders y Biden después de que los funcionarios demócratas dijeran que la representante Tulsi Gabbard (D-Hawaii) no califica.
Seis estados votaron el martes por la noche, incluyendo Mississippi, Idaho, Missouri, Dakota del Norte, el estado de Washington y el estado de Michigan, rico en delegados. Sanders perdió en Michigan, Mississippi, Idaho y Missouri, permitiendo a Biden ampliar su ventaja en el conteo de delegados. Sanders ganó en Dakota del Norte, y el estado de Washington se sigue contabilizando.
Una semana antes de eso, el Supermartes, Biden pudo tomar el liderazgo de Sanders por primera vez, provocando preguntas sobre la elegibilidad de Sanders durante las elecciones generales. El mes pasado, Biden pudo resucitar su campaña después de ir detrás de varios otros candidatos en New Hampshire y Iowa, aprovechando esa victoria durante las contiendas del 3 de marzo.
Pocahontas, working in conjunction with the Democrat Party, totally destroyed the campaign of Bernie Sanders. If she would have quit 3 days earlier, Sanders would have beaten Biden in a route, it wouldn’t even have been close. They also got two other losers to support Sleepy Joe!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) March 11, 2020
Biden también se vio impulsado por el apoyo de los antiguos candidatos de 2020, la senadora Amy Klobuchar (D-Minn.), el exalcalde de South Bend Pete Buttigieg, el exalcalde de Nueva York Michael Bloomberg y el excongresista Beto O’Rourke. La senadora Elizabeth Warren (D-Mass.) se retiró la semana pasada pero no ha apoyado a nadie.
A principios del miércoles, Trump volvió a alegar en Twitter que Warren trabajó «en colaboración con el Partido Demócrata» para destruir la campaña de Sanders, añadiendo que si hubiera renunciado días antes del Supermartes, el senador de Vermont habría derrotado a Biden.
Desde el miércoles por la tarde, Biden tiene 864 delegados a los 710 de Sanders.
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