El gobernador de Florida, Ron DeSantis, parece estar muy cerca de anunciar su largamente rumoreada candidatura presidencial, desafiando al expresidente Donald Trump y a otros por la nominación republicana de 2024.
Pero no hay que fiarse de los medios de comunicación que citan a informadores anónimos —que prometen que el 25 de mayo se presentarán en Miami los documentos federales necesarios para la campaña— según dijo a The Epoch Times una fuente cercana a DeSantis.
Y un alto funcionario del gobierno de Florida, que también pidió no ser identificado, dijo a The Epoch Times que en el Capitolio de Tallahassee ha circulado información variable sobre el anuncio de DeSantis. Se ha sugerido un posible anuncio en Miami, tal vez en el Hotel Four Seasons, como el lugar esperado, dijo el funcionario.
DeSantis ha indicado que no anunciaría su candidatura presidencial hasta después de que finalice la sesión legislativa anual de dos meses del estado. Aunque la sesión terminó oficialmente el 5 de mayo, los legisladores siguen presentando a su oficina los proyectos de ley recién aprobados.
Uno que aún no ha llegado a su mesa es el SB 7050, un largo proyecto de ley electoral que, en una pequeña parte, aclara que el gobernador no tendría que renunciar para presentarse a las elecciones presidenciales.
Y DeSantis ha indicado que necesitaría firmar el presupuesto estatal antes de anunciar una campaña presidencial.
Secreto celosamente guardado
Aunque los verdaderos detalles sobre los planes de DeSantis son ciertamente conocidos por algunos legisladores, parecen formar parte de un secreto estrechamente guardado, dijo el funcionario estatal, que expresó su esperanza de ser invitado a las festividades.
Aun así, los medios de comunicación de todo el país han informado con frenesí —citando fuentes anónimas y a unos y otros— que DeSantis presentará la documentación necesaria para ser candidato justo antes o después de una reunión el 25 de mayo con donantes de mucho dinero en Miami. Algunos han sugerido que le seguirá un anuncio en Miami.
«Por supuesto, los detalles se atribuyen a fuentes anónimas (las favoritas del gobernador), pero hay demasiado humo como para descartar esto como una situación de ‘la gente lo dice'», escribió el 19 de mayo el bloguero de Florida Peter Schorsch en su resumen diario de los acontecimientos políticos del estado.
Otros medios de comunicación han reportado que DeSantis iniciará formalmente la campaña el 29 de mayo en su ciudad natal de Dunedin, en el área de Tampa Bay.
Cuando DeSantis visita la zona, una enfermera lo cuela por la puerta trasera de un centro de vida independiente cercano para que pueda pasar tiempo con su madre sin armar jaleo, según dijo una fuente de la ciudad costera a The Epoch Times.
Más pruebas de que se acerca un anuncio
El 15 de mayo, camiones de mudanzas se detuvieron en la sede de los Republicanos de Florida para trasladar la operación política de DeSantis de allí a sus propias dependencias.
Ese mismo día, Bryan Griffin, que había sido portavoz de la Oficina de Prensa del Gobernador, dejó su puesto en el Estado para convertirse en portavoz de la «operación política» de DeSantis.
«Creo que el gobernador DeSantis es el único líder que puede llevarnos a la victoria en este momento crítico de la historia estadounidense», dijo Griffin en su carta de renuncia. «Si puedo ser aunque sólo sea una pequeña parte del renacimiento y la restauración de nuestra gran nación, entonces estoy dispuesto a darlo todo».
Y el equipo político ha estado ocupado anunciando otras victorias que sólo tienen sentido en el contexto de una campaña política activa.
En Iowa, sede del primer caucus republicano, DeSantis recibió el apoyo de 37 legisladores republicanos, más de un tercio de ellos. Y eso es más de lo que cualquier candidato presidencial republicano recibió en el estado en 2016.
El Never Back Down PAC anunció los apoyos el 12 de mayo, un día antes de que DeSantis visitara el estado.
En New Hampshire, sede de las primeras primarias, Never Back Down anunció el 16 de mayo que 51 legisladores republicanos lo habían respaldado.
Trump saltó a los titulares esta primavera con sus crecientes cifras en las encuestas contra DeSantis y el respaldo de 11 de los 19 congresistas republicanos de Florida.
Pero desde entonces, 99 de los 113 legisladores republicanos han respaldado a DeSantis para presidente, incluidos los líderes de ambas cámaras, el presidente de la Cámara de Representantes, Paul Renner, y la presidenta del Senado, Kathleen Passidomo.
DeSantis cooperó estrechamente con Renner y Passidomo en la tramitación de docenas de proyectos de ley que representaban sus prioridades a través de la sesión legislativa anual del estado.
«Hicimos dos años de legislación en un año», dijo a The Epoch Times el presidente Pro Tempore, Chuck Clemons, segundo republicano en la Cámara de Representantes.
DeSantis ha mantenido un ritmo vertiginoso de apariciones públicas, ruedas de prensa y firmas de proyectos de ley. También ha metido con calzador viajes por todo el país en una gira de promoción de su recién publicado “The Courage To Be Free: Florida’s Blueprint for America’s Revival».
Algunos, entre ellos Trump, se han quejado de que la gira del libro ha sido un sustituto apenas velado de una campaña presidencial.
Sus viajes también se han extendido al extranjero.
En abril, DeSantis reforzó su perfil internacional, viajando con su esposa a Israel, Reino Unido, Japón y Corea del Sur para hablar de comercio y pronunciar discursos.
Resolver el «renunciar para presentarse»
El obstáculo más probable para cualquier anuncio oficial de campaña presidencial puede ser el proyecto de ley electoral SB 7050. El Senado aún no la ha transmitido a DeSantis para que lo firme.
«El proyecto de ley se enviará en las próximas semanas, junto con otros proyectos de ley», dijo un ayudante de Passidomo a The Epoch Times en un correo electrónico.
Después de que los proyectos de ley pasen con éxito por la Cámara de Representantes y el Senado del estado, deben ser firmados y enviados al gobernador por los líderes de esas cámaras.
Una vez que lleguen a la mesa de DeSantis, dado que la sesión legislativa ha concluido oficialmente, dispondrá de 15 días para tomar medidas.
Si no la firma o la veta, se convertirá en ley.
El proyecto de ley afecta a la candidatura de DeSantis. Es una «aclaración» de la ley electoral de Florida, que actualmente exige que algunos funcionarios activos renuncien a sus cargos cuando se presentan a otro cargo.
La ley actual exige la renuncia cuando el cargo electo «cumple los requisitos» para ser candidato a otro cargo. La cualificación implica rellenar papeles y otras tareas para hacer oficial la candidatura, dijo un ayudante de Renner a The Epoch Times.
Según la ley actual, la dimisión no es efectiva hasta que comienza el mandato del nuevo cargo, pero es irrevocable.
El nuevo proyecto de ley aprobado por la Cámara de Representantes y el Senado de Florida elimina el requisito de la dimisión.
Renner ha dicho públicamente que no cree que la redacción actual de la ley obligue a renunciar a un funcionario estatal que se presenta a la presidencia.
Y presentarse a la presidencia no implica el mismo proceso de cualificación que la candidatura a un cargo estatal o local, como presentar los papeles en el juzgado local, dijo el ayudante de Renner.
Pero los legisladores añadieron lo que Renner ha llamado una «aclaración» al proyecto de ley: una línea que exime claramente a los candidatos a presidente o vicepresidente del requisito de renuncia a presentarse.
Fue un retoque para evitar impugnaciones judiciales, dijo Clemons.
DeSantis ha celebrado numerosas ceremonias de firma en los últimos días, algunas para cinco o seis proyectos de ley relacionados simultáneamente. El 16 de mayo, 62 proyectos de ley llegaron a su mesa. Al día siguiente, firmó 21 de la pila.
No está claro cuándo firmará el que le despeje el camino para anunciar su candidatura a la presidencia.
DeSantis obtuvo una resonante victoria en la reelección hace apenas seis meses, derrotando a Charlie Crist, un excongresista demócrata que anteriormente había sido gobernador republicano del estado. DeSantis venció a Crist por un margen de casi 2 a 1.
Si DeSantis se convirtiera en presidente, dejaría vacante su cargo de gobernador de Florida cuando le quedan dos años de su segundo mandato. Según la ley de Florida, la vicegobernadora Jeanette Nuñez sería designada para ocupar el cargo los dos años restantes.
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