Las recientes revelaciones que arrojan luz sobre la colaboración entre Twitter y el FBI son solo «la punta del iceberg», alegó Marc Ruskin, agente retirado del FBI y exayudante del fiscal del distrito, en una entrevista emitida en Newsmakers por NTD y The Epoch Times el 21 de diciembre.
Para destapar por completo la colusión entre las grandes empresas de tecnología y el FBI, Ruskin cree que es necesario un abogado especial.
«Esta es exactamente la clase de situación que requiere un abogado general, o especial, para averiguar quién estuvo implicado», declaró Ruskin.
«Y lo que es más importante, en este momento, quién … en el gobierno … autorizó estas intrusiones en los derechos constitucionalmente protegidos de las cuentas de los individuos que fueron señalados, y fueron marcados, por el Buró y otras agencias».
Descubrir la colusión y el abuso
Twitter no es una excepción en sus interacciones con las agencias gubernamentales, según Ruskin
«Vamos a descubrir que hubo otras interacciones entre las agencias gubernamentales oficiales, como el Buró [FBI] y Seguridad Nacional, y otras grandes empresas de tecnología».
Debido a esa interacción, Ruskin declaró que debe haber una investigación inmediata. Y, además de pedir un abogado especial, Ruskin cree que las audiencias del Congreso son necesarias, así como una investigación dirigida por el Inspector General del Departamento de Justicia.
En relación con la implicación del FBI en Twitter, Ruskin declaró: «Es evidente que parece incorrecto. Y una investigación completa demostraría si hubo abuso de poder».
«Ciertamente parece probable que aquí se haya cruzado la línea entre lo que es un comportamiento apropiado en una democracia, donde se espera que una agencia federal de aplicación de la ley sea independiente y objetiva».
«Aquí, ciertamente parece que se cruzó la línea y que la independencia y la objetividad fueron dejadas de lado, al menos por los altos mandos [del FBI]».
Libertad de expresión
En cuanto a la libertad de expresión en Estados Unidos, Ruskin cree que la Primera Enmienda está siendo atacada.
«Hace veinte o treinta años, había unanimidad en cuanto a la creencia de que la libertad de expresión —especialmente la libertad de expresión política, la expresión de creencias o la libertad de expresión religiosa— era sagrada y no se podía interferir en ella.
«Ahora, con la introducción del concepto de ‘desinformación’, para justificar lo que [el filósofo germano-estadounidense Herbert] Marcuse llamaba ‘tolerancia represiva’ —es decir, que cuando se defiende que debe haber libertad de expresión, sin embargo, es necesario restringir algunas expresiones por el bien de la sociedad— es como se está entrando por la puerta de atrás. Calificando ciertas expresiones de ‘perjudiciales para la sociedad’ y, por tanto, merecedoras de control y límites».
Ruskin alegó que una vez que se introduce el concepto básico de Marcuse, la cuestión pasa a ser quién determina qué se califica como «desinformación», o «discurso bueno» y «discurso malo». Y ahí es donde el ataque a la libertad de expresión se vuelve especialmente peligroso, ya que es una «pendiente resbaladiza hacia un estado totalitario».
Los Archivos de Twitter
Desde que tomó el control de Twitter, Elon Musk se ha manifestado a favor de la transparencia y la necesidad de que la gente vea lo que ocurría entre bastidores en la empresa de redes sociales. Con ese fin, publicó correos electrónicos secretos y discusiones sobre el shadow banning o la eliminación de cuentas que no seguían la línea del partido. Se llaman los Archivos de Twitter.
Además, la última entrega de los Archivos Twitter incluye revelaciones que parecen demostrar que el FBI trabajó estrechamente con Twitter para desacreditar reportes, como la historia de la laptop de Hunter Biden.
En concreto, en relación con la historia de la laptop, la entrega alegó que agentes del FBI, en colaboración con exagentes del FBI posteriormente empleados en Twitter, prepararon a altos ejecutivos de Twitter y Facebook para descartar rotundamente la historia de la laptop como desinformación rusa.
Otra información de la entrega alega que funcionarios del FBI marcaron cuentas específicas para que Twitter las suprimiera.
En respuesta a las acusaciones, el FBI emitió un comunicado a Fox News negando cualquier irregularidad por su parte.
«La correspondencia entre el FBI y Twitter no es más que un ejemplo de nuestras relaciones tradicionales, de larga data y permanentes entre el gobierno federal y el sector privado, en las que participan numerosas empresas de diversos sectores e industrias», dice el comunicado.
Afirma además que las acusaciones contra el FBI son el resultado de «teóricos de la conspiración» que trabajan para desacreditar al FBI ante los estadounidenses.
Como parte de su reportaje, The Epoch Times pidió comentarios al Departamento de Justicia y al FBI sobre las revelaciones de los archivos de Twitter y su relación con las empresas de redes sociales.
La Oficina Nacional de Prensa del FBI respondió: «El FBI colabora regularmente con entidades del sector privado para proporcionar información específica sobre actividades subversivas, no declaradas, encubiertas o delictivas de agentes extranjeros identificados que ejercen una influencia maligna.
«No se basa en el contenido de ningún mensaje o narrativa en particular. Las entidades del sector privado toman decisiones de forma independiente sobre qué medidas, si es que toman alguna, en sus plataformas y para sus clientes después de que el FBI les haya notificado”.
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