Mientras los padres de todo el país piden una mayor transparencia en las escuelas públicas, el secretario de Educación de EE. UU., Miguel Cardona, eludió repetidamente una pregunta acerca de si los padres deben ser informados si su hijo está sometido a una transición de género en la escuela.
Durante una audiencia virtual el 26 de mayo, Cardona testificó ante el Comité de Educación de la Cámara de Representes sobre la solicitud de presupuesto de su departamento para 2023. Continuó evitando dar respuestas directas cuando el representante Jim Banks (R-Ind.) le preguntó si pensaba que las escuelas debían «mantener en secreto la transición de género de un estudiante ante sus padres».
“Me encantaría responder preguntas sobre el presupuesto, por eso estoy aquí”, respondió Cardona, a lo que Banks replicó exigiéndole que explicara la postura del Departamento de Educación sobre esa cuestión.
“Me está pidiendo que financie su presupuesto”, argumentó Banks. “Es completamente relevante el por qué está usted aquí hoy”.
«Es una pregunta sencilla: ¿Las escuelas deberían mantener en secreto a los padres si sus hijos están involucrados en la transición de género?», preguntó de nuevo el congresista.
«Los padres y las escuelas deben trabajar juntos para apoyar a los estudiantes», dijo el secretario, señalando las «políticas y prácticas» que, según él, prueban lo que estaba diciendo.
Banks, visiblemente confundido, interrumpió a Cardona y repitió la pregunta una vez más: «¿Las escuelas deberían mantener en secreto a los padres si sus hijos están involucrados en la transición de género?»
«Las escuelas deberían colaborar con los padres en la comunicación, y hay veces que las escuelas trabajan y apoyan a los estudiantes en temas que son muy delicados, pero sí creo que los padres deben estar en contacto con las escuelas y, en muchos casos, trabajar juntos es lo que va a ayudar al estudiante», dijo Cardona.
“He hablado con estudiantes que compartieron, sea cual sea la situación en su hogar, que se sentían seguros en la escuela, y tenemos que tener cuidado de no convertir esto en algo que no es”, continuó. “Nuestras escuelas son lugares seguros para nuestros estudiantes, y nuestros maestros son con frecuencia los primeros en apoyar a nuestros estudiantes cuando tienen problemas en sus vidas».
“Esta es una respuesta muy extraña”, dijo Banks antes de ceder el resto de su tiempo de intervención.
En los últimos años, los distritos escolares de todo el país han dado instrucciones a los educadores para que pasen por alto el consentimiento y la notificación a los padres cuando se trata de la transición de género de un estudiante.
Por ejemplo, la «Guía para estudiantes transgénero» oficial de Nueva Jersey dice a los distritos escolares que eviten «trabajar con estudiantes transgénero» para evitar «revelar inadvertidamente la condición de estudiante transgénero» a sus propios padres. Del mismo modo, las directrices de las Escuelas Públicas del Distrito de Columbia señalan que «los estudiantes pueden elegir que sus padres participen en el proceso de transición, pero la participación de los padres no es obligatoria».
En Massachusetts, las escuelas tienen instrucciones del estado de «hablar primero con el estudiante antes de discutir la no conformidad de género de un estudiante o su estatus transgénero con los padres del estudiante» y de discutir con el estudiante si se reflejarán los cambios de pronombre o nombre en las mensajes escritos con los padres.
Mientras tanto, las pautas de las Escuelas Públicas de Chicago establecen que «al hablar con otros miembros del personal, padres, tutores o terceros, el personal escolar no debe revelar el nombre preferido, pronombre u otra información confidencial de un alumno relativo con el estado transgénero o no conforme con el género sin el permiso del alumno».
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