El gobierno mexicano casi triplicará de forma permanente su despliegue de la Guardia Nacional tras el paso del huracán Otis en Guerrero, estado del sur del país que padecía una ola de violencia del crimen organizado antes del embate del histórico ciclón.
El estado tenía 5120 elementos de la Guardia Nacional (GN), pero tras el huracán contará con 14,620, de los que 9860 estarán en Acapulco, la ciudad más poblada y la más afectada por Otis, reveló este martes el secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, en la conferencia matutina en Palacio Nacional.
“Será el estado que mayor cantidad de Guardia Nacional va a tener”, indicó el general en la rueda de prensa.
El titular de la SEDENA dijo que constituye el mayor número de elementos de la Guardia Nacional para un estado en el país, superando a Guanajuato, que tiene 6670 elementos.
En el municipio de Acapulco, uno de las más afectados de Guerrero por los efectos de Otis, la GN cubrirá la seguridad de 38 sectores que comprenden a colonias con más de 1000 viviendas, para ser atendidas por 81 compañías con 250 elementos cada una.
El general Sandoval dijo que los casi 10,000 elementos de la GN ya están en Acapulco, y que su secretaría busca 38 predios de una hectárea para construir las instalaciones permanentes de las nuevas compañías que realizarán con apoyo de la iniciativa privada
A casi dos semanas del azote de Otis, que tocó tierra el 25 de octubre como categoría 5 en Guerrero, donde dejó 48 muertos y rompió el récord de intensificación de un ciclón en México, continúan las labores de búsqueda y rescate de personas en Acapulco y Coyuca de Benítez, las ciudades más impactadas.
“Con este plan lo que se busca es que de manera permanente esté la Guardia Nacional en Acapulco para continuar garantizando esta seguridad”, declaró el general Sandoval, para que “la paz y la tranquilidad de los ciudadanos continúe» y se «pueda garantizar esa seguridad”.
Explicó que los objetivos del plan de seguridad para Acapulco buscan generar condiciones de seguridad para toda la población, para la reconstrucción del puerto, así como para la reactivación del empleo, la economía local y el turismo nacional e internacional.
Los destrozos del ciclón dejaron a decenas de miles de personas sin alimento, por lo que se desataron los robos y la rapiña en los supermercados.
Tras el paso del huracán, el gobierno desplegó cerca de 20,000 elementos de las Fuerzas Armadas, entre la Marina, el Ejército, la Fuerza Aérea y la Guardia Nacional, pero la estrategia oficial busca evitar que la violencia vuelva a Guerrero y, en particular, a Acapulco, uno de los puntos turísticos más importantes del país.
“Lo que se busca es que de manera permanente esté la Guardia Nacional en el municipio de Acapulco para continuar garantizando esa seguridad, que la paz y la tranquilidad de los ciudadanos continúen”, expuso Sandoval.
La violencia se agudizó en Acapulco en agosto pasado, cuando bloqueos y ataques de grupos criminales dejaron más de 7500 cancelaciones de habitaciones de hotel esta temporada vacacional, según empresarios del sector.
Y el 23 de octubre, apenas dos días antes del embate de Otis, el crimen organizado mató a 13 policías en Coyuca de Benítez, entre ellos el secretario de Seguridad municipal, Alfredo Alonso López, y el director de la Policía Preventiva Municipal, Honorio Salinas Garay.
Guerrero ocupa el séptimo lugar nacional en número de homicidios, con 1280 asesinatos en los primeros tres trimestres de 2023, según la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC).
Con información de Blanca Téllez.
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
