El 20 de diciembre se aprobó en el Senado de Estados Unidos una ley bipartidista destinada a reforzar y ampliar las leyes federales para proteger a los niños de los depredadores y la explotación online.
Los senadores Jon Ossoff (D-Ga.) y Chuck Grassley (R-Iowa) presentaron el pasado agosto en el Senado la «Ley de prevención de abusos sexuales a menores de 2022″.
El proyecto de ley ha recibido un amplio apoyo y respaldo de los organismos de protección de la infancia y de aplicación de la ley.
Entre ellos se encuentran el Centro Nacional para Niños Desaparecidos y Explotados (NCMC), el Centro Nacional sobre Explotación Sexual (NCOSE), la Asociación Nacional de Fiscales de Estados Unidos, el Centro Internacional para Niños Desaparecidos y Explotados (ICMEC), Rights4Girls, Stop Child Predators y Keep Kids Safe Movement.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) estiman que, en Estados Unidos, una de cada cuatro niñas y uno de cada 13 niños sufrirá abusos sexuales, y que el 91% de los abusos sexuales a menores son perpetrados por un familiar o alguien de confianza de la víctima.
Como documentan los CDC, las cicatrices, el sufrimiento y el trauma del abuso permanecen con los supervivientes durante años y pueden aumentar la susceptibilidad a las enfermedades físicas y emocionales y al abuso de sustancias.
El abuso sexual en la infancia también aumenta el riesgo de que las personas se conviertan en víctimas de violencia sexual en la edad adulta.
«Los padres de todo Georgia están cada vez más preocupados por los depredadores sexuales en internet que tienen como objetivo a los niños», dijo el senador Ossoff en un comunicado de prensa que su oficina emitió anunciando la aprobación de la Ley.
«Reuní a republicanos y demócratas para mantener a los niños más seguros en internet y tomar medidas enérgicas contra los depredadores y abusadores con todo el peso de la ley».
El turismo sexual en el punto de mira
La aprobación de la ley se produjo la misma semana en que el FBI, Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI, por sus siglas en inglés) y el Centro Nacional para Menores Desaparecidos y Explotados (NCEMEC, por sus siglas en inglés) emitieron un comunicado conjunto en el que advertían de una «explosión de incidentes de niños y adolescentes coaccionados para enviar imágenes explícitas online y extorsionados a cambio de dinero, un delito conocido como sextorsión financiera».
En el comunicado, el FBI reveló que en «el último año, las fuerzas policiales han recibido más de 7000 denuncias relacionadas con la sextorsión financiera online de menores, con el resultado de al menos 3000 víctimas, principalmente varones, y más de una docena de suicidios».
Una disposición primordial de la legislación Ossoff-Grassley es redefinir y hacer menos ambigua la ley federal sobre turismo sexual.
El senador Grassley ha citado sistemáticamente, para argumentar que es necesario cambiar el estatuto del turismo sexual en la ley federal, el caso de Larry Nassar, que fue médico durante mucho tiempo del equipo femenino de gimnasia de Estados Unidos y fue acusado y condenado por ser un abusador sexual en serie de las atletas que trató, algunas de las cuales eran menores de 13 años.
Cuando los fiscales llevaron a Nassar a juicio en 2016, no incluyeron un cargo de turismo sexual porque consideraron que la ley no era lo suficientemente fuerte en esa área para asegurar una condena, a pesar de que Nassar había agredido a víctimas en lugares a los que había viajado después de cruzar fronteras estatales e internacionales.
El proyecto de ley Ossoff-Grassley ayuda a los fiscales añadiendo un texto a la ley federal que estipula que una persona ha cometido un delito de turismo sexual cuando cruza fronteras estatales o internacionales con la «intención de participar» en una actividad sexual ilegal.
Nassar fue nombrado por 265 mujeres como agresor. Fue declarado culpable en 2017 de cargos federales de pornografía infantil y manipulación de pruebas, por los que fue condenado a 60 años de prisión.
En 2108, fue condenado dos veces en Michigan por cargos de agresión sexual, recibiendo una sentencia de 40 a 175 años en la primera condena y una sentencia de 40 a 125 años en la segunda.
Aplausos al esfuerzo conjunto
Entre quienes han aplaudido el anuncio de la aprobación de la Ley de prevención de abusos sexuales a menores se encuentra Tasha Schwikert Moser, medallista olímpica de gimnasia en 2000.
Schwikert Moser y su hermana, Jordan Schwikert, exmiembro del equipo nacional femenino de gimnasia de Estados Unidos, son supervivientes de las agresiones de Larry Nassar.
Schwikert Moser emitió este comentario en respuesta a la aprobación del proyecto de ley: «Gracias al senador Grassley y al senador Ossoff por crear un proyecto de ley federal que prioriza la seguridad de los niños al corregir las lagunas en las leyes federales existentes para garantizar que los perpetradores de abuso sexual infantil enfrenten una mayor responsabilidad por sus atroces acciones bajo la ley federal».
«En última instancia, los niños estarán más seguros gracias a este proyecto de ley».
En un comunicado, el Centro Internacional para Menores Desaparecidos y Explotados (ICMEC, por sus siglas en inglés) aplaudió los esfuerzos del senador Ossoff y del senador Grassley, al mismo tiempo que declaró que aún queda mucho trabajo por hacer para mantener a salvo a los niños.
«En Estados Unidos, alguien es agredido sexualmente cada minuto. Y cada nueve minutos, la víctima es un niño. Sin embargo, solo 25 de cada 1000 agresores terminan en prisión», dijo Bob Cunningham, director ejecutivo de ICMEC.
«Los senadores Grassley y Ossoff hacen una declaración inequívoca de que debemos centrarnos directamente en la responsabilidad de las personas que explotan a los niños. Este proyecto de ley hará que la ley sea totalmente clara cuando se trata de la victimización sexual de los niños, estableciendo una política de tolerancia cero en la ley federal».
«En el ICMEC aplaudimos esos esfuerzos y trabajaremos incansablemente con el Congreso para garantizar que cualquiera que abuse sexualmente de un niño sea procesado y condenado».
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