El senador de EE. UU., Bob Menéndez, expresó este lunes su preocupación y su «oposición rotunda» a las negociaciones sobre el petróleo de la administración Biden con el régimen de Venezuela, diciendo «corremos el riesgo de perpetuar una crisis humanitaria que ha desestabilizado a América Latina y el Caribe», a través de un comunicado.
Esto ocurre luego que la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, confirmara el lunes por la tarde la visita de una delegación de EE. UU. a Venezuela, diciendo que se trató de un viaje por cuestiones de «seguridad energética», en una conferencia de prensa en la Casa Blanca. Agregando que el propósito del viaje fue «también para abordar el estado y la salud de los estadounidenses detenidos»—en referencia a los seis exdirectivos de CITGO (filial en EE. UU. de la petrolera estatal venezolana PDVSA)—en respuesta a una pregunta de un reportero sobre las conversaciones.
Algunos analistas han sugerido que las sanciones a Venezuela podría proporcionar una fuente alternativa de suministro de energía global, sin embargo, algunos legisladores de EE. UU. como Marco Rubio (R-FL) criticaron que la administración Biden a través de la reunión busque levantar las sanciones impuestas al régimen de Venezuela y al líder Nicolás Maduro a cambio de la venta de petróleo, calificándola como «una oferta ridícula y peligrosa».
«Si son ciertos los informes de que la administración Biden está intentando negociar con el régimen de Maduro para comprar petróleo venezolano, tengo serias preocupaciones que corremos el riesgo de perpetuar una crisis humanitaria que ha desestabilizado a América Latina y el Caribe durante toda una generación», dijo Bob Menéndez, presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, a través de un comunicado el lunes.
El presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado dijo que Maduro es un cáncer para nuestra región y que las acciones que EE. UU. lleve a cabo no «debería dar nueva vida a su reino de tortura y asesinato».
«Como tal, me opongo clara y rotundamente a cualquier esfuerzo que rellene los bolsillos de los oligarcas del régimen de Maduro con dineros del sector petrolero mientras que Maduro sigue privando al pueblo venezolano de sus derechos humanos, libertades e incluso necesidades básicas como un plato de comida», dijo.
Señaló que los esfuerzos de la administración por unificar al mundo contra Moscú entorno a la invasión en Ucrania, no deben ser contrarrestadas por sustentar a Maduro, quien es investigado por crímenes de lesa humanidad y agregó «Las aspiraciones democráticas del pueblo venezolano, al igual que la determinación y el coraje del pueblo de Ucrania, valen mucho más que unos pocos miles de barriles de petróleo».
Por su parte, el congresista Carlos Gimenez (R-FL) calificó este martes como vergonzosa la negociación de la administración Biden de un acuerdo de venta de petróleo con Venezuela.
«¿Qué tal si ponemos el petróleo estadounidense, los empleos estadounidenses y la economía estadounidense PRIMERO y MANTENEMOS las sanciones contra dictadores como Nicolás Maduro? Todo lo que hace Biden está muy al revés», escribió Gimenez a través de Twitter.
El exembajador de Colombia en Washington de 2018 al 2021, Francisco Santos, calificó como incoherente la política exterior de Biden.
«La incoherencia en la política exterior de Biden es brutal. Pide respeto a los DD.HH y negocia con el mafioso narco-violador de derechos humanos Nicolás Maduro», dijo Santos el 7 de marzo.
Con información de VOA.
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