El senador Ron Wyden (D-Ore.) condenó los disturbios de los activistas anarcocomunistas en Portland el día de la inauguración.
«La repudio en todas las formas posibles: la violencia en cualquier forma. La violencia de cualquier tipo está mal», dijo Wyden a The Washington Examiner el viernes.
Algunos republicanos denunciaron el hecho de que sus homólogos demócratas no condenaran los disturbios en Portland y Seattle a pesar de que castigaron duramente la irrupción en el Capitolio del 6 de enero, diciendo, en algunos casos, que el expresidente Donald Trump y otros republicanos la alentaron.
«Estoy esperando a que el presidente Biden condene la violencia/el saqueo/el incendio provocado de los dos últimos días en Oregón y el estado de Washington», escribió el jueves el senador Chuck Grassley (R-Iowa).
Los miembros de Antifa rompieron la puerta de cristal y las ventanas de la oficina del Partido Demócrata en Oregón, y pintaron con spray un símbolo anarquista sobre el cartel del partido. Los contenedores de basura de los alrededores fueron derribados y se les prendió fuego, según los reportes. Los activistas de Antifa marcharon con pancartas que decían: «No queremos a Biden. Queremos venganza por los asesinatos policiales, las guerras imperialistas y las masacres fascistas» y «Somos ingobernables», junto con numerosos símbolos anarquistas.
El Partido Demócrata de Oregón emitió un comunicado tras la violencia.
«Estamos frustrados y decepcionados por los daños causados a nuestra sede del Partido Demócrata de Oregón en Portland esta tarde. Estamos agradecidos de que ningún miembro de nuestro personal estuviera en el edificio en ese momento. Esta no es la primera vez que nuestro edificio ha sido objeto de vandalismo durante el año pasado —ninguno de los incidentes anteriores nos ha disuadido de nuestro importante trabajo para elegir a los demócratas en las boletas electorales, y este no será diferente».
La policía de Portland se enfrentó a una multitud que se reunió frente a un edificio de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza cerca del centro de la ciudad, y algunos de los asistentes quemaron posteriormente una bandera estadounidense en la calle.
En Seattle, los activistas de Antifa marcharon hacia el icónico mercado de Pike Place para destrozar la propiedad, un video de la escena muestra las ventanas rotas en un Starbucks. Un grupo de activistas vestidos de negro marchó a lo largo de la calle, pateando contenedores de basura, llevando una bandera estadounidense raída con el signo anarquista pintado con aerosol.
Algunos pintaron con aerosol un símbolo anarquista en edificios y rompieron ventanas, incluso en el Juzgado William Kenzo Nakamura, un edificio federal, según KOMO.
«No a los policías, a las prisiones, a las fronteras, a los presidentes», decía una pancarta bajo la que marcharon, según los reportes del lugar.
La policía anunció que dos personas fueron detenidas durante los disturbios, una por daños a la propiedad y otra por agresión.
Tras los disturbios, Twitter suspendió varias cuentas de Antifa.
Una de las cuentas más destacadas que se suspendieron fue la de «The Base», una librería de Brooklyn, Nueva York, en la que Antifa entrenaba a nuevos reclutas para el grupo activista radical, según el periodista independiente Andy Ngo.
La suma de todas las cuentas alcanzaría unos 70,000 seguidores. Algunas de las primeras cuentas están en Twitter desde 2012.
Seattle y Portland han sido escenario de disturbios durante meses, con una mezcla de manifestantes —que incluyen anarquistas, Antifa y otros grupos de extrema izquierda, así como activistas de los derechos civiles— que han expresado diversas quejas y, en ocasiones, han protagonizado actos de violencia, daños a la propiedad y enfrentamientos con la policía.
Co información de Tom Ozimek.
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