WINDSOR, Ontario. Un convoy de camiones y otros vehículos continúa bloqueando un cruce fronterizo principal entre Canadá y EE.UU. debido a los mandatos y restricciones provinciales y federales relacionados con el COVID-19.
Los manifestantes del lado canadiense de la frontera inicialmente se dirigieron al puente Ambassador el 6 de febrero, estacionaron sus vehículos y crearon un bloqueo. Dicen que permanecerán allí hasta que se cumplan sus demandas para que se eliminen los mandatos relacionados con el COVID-19.
“Aquí hay suficiente comida. Algunos de los muchachos acamparon e hicieron arreglos, hay barbacoas aquí, obtuvieron todo tipo de alimentos”, le dijo a The Epoch Times el 9 de febrero Bernie Berg, un pastor de Leamington que está instalado en el sitio.
“Los residentes del área traen comida y ayer los negocios estaban entregando pizza. La gente te está trayendo café y donas. Es casi como un ambiente de fiesta”.
La protesta es una de las muchas iniciadas en Canadá por camioneros contra un requisito del gobierno federal que exige que todos los conductores de camiones transfronterizos se vacunen contra el COVID-19. Desde entonces, el movimiento de protesta se ha expandido, atrayendo a muchos simpatizantes de diferentes partes de Canadá que quieren que todos los niveles de gobierno eliminen sus mandatos y restricciones relacionados con el COVID-19.
El puente Ambassador, que conecta Windsor, Ontario, con Detroit, Michigan, es el cruce internacional más transitado de América del Norte, por el cual transitan mercancías valuadas en cerca de USD 320 millones cada día.
“Necesitamos detener el bloqueo a las cadenas de suministro”, dijo el primer ministro Justin Trudeau sobre el bloqueo fronterizo el 9 de febrero. “Los empleos se están siendo afectados”.
La Casa Blanca también dijo el 9 de febrero que el cierre de la frontera “representa un riesgo para las cadenas de suministro de la industria automotriz porque el puente es un conducto clave para los componentes y repuestos de los vehículos motorizados”.
Berg dice que los impactos de los mandatos y restricciones por COVID-19 han sido devastadores y que las personas no tienen otra opción.
“No es que queramos hacer esto, pero tenemos que enviar un mensaje a Ottawa debido a estos terribles mandatos que han dañado a tanta gente”, dijo Berg.
“Muchas personas han perdido sus trabajos. La gente está contemplando el suicidio. Lo que está pasando aquí es simplemente increíble con estos mandatos terribles, terribles, y la gente quiere libertad. Así que esta es su forma de expresarlo”.
Sisi, residente de Windsor, quien solo dio su apellido, dijo que protesta porque quiere defender a sus hijos.
“Es la segregación. No es justo que los niños no tengan la opción de asistir a deportes. No deberían tener que usar una mascarilla en la escuela”, dijo en una entrevista. “Tenemos todo el derecho a protestar pacíficamente”.
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