Simón, la película nominada al Goya es «el abrazo que necesitan los venezolanos», según su creador

Por Cristina Bazán
01 de febrero de 2024 4:27 PM Actualizado: 02 de febrero de 2024 4:02 AM

Diego Vicentini, director de la película Simón, una producción que está representando a Venezuela en los premios Goya de este año, revela lo que significa para él llevar a la pantalla grande una historia sobre el éxodo venezolano.

El cineasta venezolano-americano compartió en entrevista con The Epoch Times en Español, cómo su ópera prima ha tocado el corazón de la gente a nivel internacional, al mostrar aspectos que no conocían de la crisis migratoria venezolana y las violaciones de derechos humanos que ha sufrido todo un pueblo en manos del régimen chavista desde hace más de dos décadas.

El filme fue nominado a mejor película iberoamericana en los premios Goya, considerados como los premios Oscar para el cine en español, y está compitiendo con otras producciones de Argentina, Chile, Puerto Rico y Portugal. La premiación se llevará a cabo este 10 de febrero en Valladolid, España.

La película cuenta la historia de Simón, un joven que emigra a los Estados Unidos en busca de mejores condiciones de vida e intenta solicitar asilo, mientras enfrenta el trauma y la culpa por alejarse de su país. Entonces, debe decidir si olvidará su pasado o volverá a su país para luchar por la libertad.

La historia fue escrita por el mismo Vicentini y este fue su reto más grande al emprender este viaje, comentó. Tenía demasiada información importante para compartir, por lo que dijo que le fue difícil filtrarla y condensarla para crear un producto que pudiera resumir claramente las experiencias de la diáspora y que conectara con la gente.

Diego Vicentini, director de la película Simón. (Cortesía Diego Vicentini)

El resultado es esta obra que para Vicentini, en primer lugar, está informando las razones que llevaron a más de 7 millones de venezolanos a emigrar a otros países.

“El venezolano sufrió mucho de xenofobia, de maltrato, prejuicio”, dijo. “Esta película puede ser una oportunidad para que quienes conozcan a un venezolano, entiendan por qué tantos nos hemos ido: que no ha sido porque hemos querido, sino por todo lo que nos han hecho en nuestro país”.

Al mismo tiempo, el director espera que la película permita a sus compatriotas validar su propia historia, “hacer un registro histórico para no olvidar qué es lo que ha ocurrido, a quiénes han matado”, dijo.

Pero sobre todo, Vicentini quiere que la película lleve un mensaje de perdón y que ayude a otros, como él, a liberarse de esa culpa “que cargamos todos, de sentir que no hemos logrado cambiar nuestro país para mejor”, compartió. “Es como darnos ese abrazo que siento que necesitamos”.

Escenas de la película Simón, nominada a los premios Goya 2024. (Cortesía de Diego Vicentini)

La respuesta del público

Vicentini ha podido ver ya los frutos de su esfuerzo, logrando conmover a la audiencia de diversos países donde se ha presentado la película.

“Por ejemplo, en Ecuador se paró un ecuatoriano y pidió disculpas en nombre de los ecuatorianos a los venezolanos diciendo: ‘Ahora entiendo que necesitan nuestro apoyo y nuestro cariño, que no ha sido fácil’», compartió.

Actualmente, Vicentini se encuentra promocionando su obra en España, mientras espera el día de la premiación.

El público español también ha reaccionado favorablemente y algunos de ellos admitieron haber tenido un prejuicio y rechazo inicial hacia la película porque pensaban que se trataría de algo demasiado político.

“Pero al verla se encontraron con una película muy humana”, explicó. ”Que no tiene que ver tanto con de qué lado político uno está parado, sino con algo mucho más sencillamente humano”.

La respuesta del público ha sido más de lo que esperaba el cineasta, quien no imaginó el éxito que tendría la producción, que fue premiada en el Festival Internacional de Cine Heartland y fue elegida como mejor película en el Festival de Cine Venezolano 2023.

La película logró ser presentada con gran éxito en el territorio controlado por el régimen de Nicolás Maduro, que optó por subestimar e ignorar las presentaciones, ya que saben por experiencias anteriores que si el régimen censura una película esto le da más promoción y la gente tratará de verla.

Esta producción se está presentando ahora en salas de cine y, después de la premiación de los Goya, anunciarán el estreno de forma digital.

Cartel de la película Simón. (Cortesía de Diego Vicentini)

Cómo surge la historia de Simón

Vicentini dejó su país natal en 2009, cuando tenía 15 años, para emigrar a los Estados Unidos. Estudió filosofía y finanzas, y durante este periodo comenzó a “enamorarse del cine”. Luego de graduarse, decidió que quería dedicarse a este arte y se mudó a Los Ángeles para estudiar una maestría en cine.

La idea de llevar a la pantalla esta historia surgió luego de realizar un corto sobre el mismo tema, que preparó como su proyecto de grado.

“Tuve la oportunidad de mostrar el corto en más de diez países y ver cómo conectaba el contenido con la audiencia y lo que significaba para los venezolanos. Me impactó mucho”, dijo el joven cineasta.

La respuesta de la gente le hizo pensar en llevar la historia a un largometraje que pudiera tener un mayor alcance.

Aunque la historia se basa en hechos reales, Vicentini dice que nunca fue un perseguido político en Venezuela, sin embargo su familia tuvo que sufrir las consecuencias de vivir bajo un régimen socialista totalitario.

La principal razón de su salida fue la inseguridad y el miedo que enfrentaron luego de ser víctimas de varios robos.

“Lo que comparto con la película y con el personaje es la culpa de estar afuera. Ver todo lo que ocurre desde lejos, sentir que uno no está allá, y que si en la vida de uno suceden cosas buenas, te genera culpa, porque en Venezuela se está sufriendo tanto”, dijo.

Por otra parte, cuenta que una de las grandes dificultades a las que se enfrentó su equipo en 2021 para realizar esta película, fue el tener que filmar en plena pandemia en medio de tantas restricciones. Las escenas fueron rodadas en Miami, en locaciones que el director ya conocía y que fueron pensadas especialmente para eso.

“Fueron como 29 días de producción y 23 locaciones, entonces fue una locación distinta cada día. Fue súper duro”, dijo.

Detrás de cámaras de la película Simón, grabada en Miami en 2021. (Cortesía de Diego Vicentini)

Pero lo más duro vino después con la promoción, al recibir la respuesta de la gente a nivel emocional.

“Compartir con la audiencia es algo muy hermoso, pero también es palpar tanto dolor que existe con tantas heridas que tiene el pueblo venezolano en todos los países que he ido. Ha sido fuerte recibir toda esa carga energética de tanto dolor que se expresa en esas salas de cine”, compartió.

Sin embargo, su compromiso por mostrar al mundo una visión diferente a la que ha querido mostrar el régimen chavista se mantiene firme.

“Es muy difícil explicar, sentarte y pasar horas para explicarle a alguien cómo está Venezuela, qué es lo que pasa, qué nos han hecho. Y ojalá eso sea como una herramienta que ahora los venezolanos tengamos: que vean la película”, explicó.

El éxodo venezolano generado por la crisis económica y humanitaria que vive el país sudamericano tras 25 años de socialismo, es considerado el más grande de la historia de occidente y la mayor crisis migratoria de América Latina.

“Creo que lo que nos toca es seguir ejerciendo presión por las vías que tengamos”, dijo el director, quien invita al público a ver la película para conocer de manera más “íntima” esta historia.

Para más información sobre la película, haga click aquí.

Siga a Cristina Bazán en X: @cristinaisbe


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