La senadora Kyrsten Sinema (D-Ariz) llegó a un acuerdo con los demócratas sobre un paquete de gastos múltiple que, según los legisladores, reformaría el código tributario, reduciría el déficit federal, disminuiría los costos de atención médica e invertiría en programas de energía y cambio climático.
El paquete de gastos parece ser una versión revisada y alternativa al proyecto de ley Build Back Better (BBB), que cumpliría con una de las principales agendas del presidente Joe Biden.
Previamente el senador Joe Manchin (D-W.Va.) había anunciado el 27 de julio que llegaron a un acuerdo con el líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer (D-N.Y.) sobre energía, impuestos y atención sanitaria para avanzar en el proyecto de ley que denominaron «Ley de reducción de la inflación de 2022».
Sinema, que anteriormente se mantuvo al margen del acuerdo, anunció el jueves que apoyaría avanzar con la medida y comenzar el debate sobre el proyecto de ley.
«Hemos acordado eliminar la disposición del impuesto sobre los intereses transferidos, proteger la manufactura avanzada e impulsar nuestra economía de energía limpia en la legislación de reconciliación presupuestaria del Senado», dijo Sinema. «Sujeto a la revisión del parlamentarista, seguiré adelante».
Sinema se refería a una disposición que cerraría la llamada laguna de intereses transferidos y generaría unos 14,000 millones de dólares en nuevos ingresos durante los próximos 10 años. Se dice que este vacío ayuda a los ricos gestores de fondos de inversión y de cobertura a pagar menos impuestos.
También se mencionó por separado a un acuerdo para proteger a la industria del impacto que significaría la propuesta de impuesto mínimo de sociedades del 15por ciento, que según los opositores pondría en peligro el crecimiento económico.
«Tras este esfuerzo, espero trabajar con [el senador Mark Warner (D-Va.)] para promulgar las reformas fiscales de los intereses transferidos, protegiendo las inversiones en la economía de Estados Unidos y fomentando el crecimiento continuo, mientras se cierran las lagunas más atroces de las que algunos abusan para evitar el pago de impuestos», dijo la senadora de Arizona, refiriéndose a las preocupaciones fiscales que afectan a los fondos de cobertura.
El acuerdo «preserva los principales componentes» del proyecto de ley original, que incluye «la reducción de los costos de los medicamentos recetados, la lucha contra el cambio climático, el cierre de las lagunas fiscales explotadas por las grandes corporaciones y los ricos, y la reducción del déficit en 300 mil millones de dólares”, dijo Schumer en una declaración el jueves.
«Me complace informar que hemos llegado a un acuerdo sobre la Ley de Reducción de la Inflación que creo que recibirá el apoyo de toda la asamblea demócrata del Senado», añadió el senador. «He tenido muchas discusiones productivas con los miembros de nuestra asamblea en los últimos tres días y hemos abordado una serie de cuestiones importantes que han planteado».
La versión final del proyecto de ley se presentará el sábado, dijo Schumer.
El líder demócrata busca aprobar la medida a través de una herramienta de procedimiento llamada «reconciliación» que permite que un proyecto de ley relacionado con los impuestos, el gasto y la deuda sea aprobado en la cámara por mayoría simple en lugar de tener que pasar el umbral de 60 votos del filibusterismo. El proceso de reconciliación también limita el debate del proyecto de ley a 20 horas. Esto podría permitir que se apruebe solo con los votos de los demócratas, si es necesario, si todos los demócratas están de acuerdo.
Se espera que el proyecto de ley incluya unos 370,000 millones de dólares en programas energéticos y climáticos y 64,000 millones de dólares para ampliar los subsidios a las primas de la Ley de Asistencia Asequible durante tres años, hasta el año 2025.
También busca generar unos 700,000 millones de dólares en nuevos ingresos durante los próximos 10 años, lo que dejaría unos 300,000 millones de dólares para la reducción del déficit.
Una gran parte de los 700,000 millones de dólares —unos 313,000 millones— se espera que se generen mediante el aumento del impuesto mínimo de sociedades al 15%, mientras que las cantidades restantes incluyen 288,000 millones de dólares con la reforma de los precios de los medicamentos con receta y 124,000 millones de dólares con la aplicación de los impuestos del Servicio de Impuestos Internos.
Apoyo de los 50 demócratas del Senado
El anuncio de Sinema significa que los 50 demócratas del Senado, dividido al 50 por ciento, apoyarán la medida. Los demócratas mantienen la mayoría gracias al voto de desempate de la vicepresidenta Kamala Harris.
El presidente Joe Biden dijo a través de una declaración de la Casa Blanca publicada a última hora del jueves que «hemos dado otro paso crítico hacia la reducción de la inflación y el coste de la vida para las familias de Estados Unidos», y añadió: «Espero que el Senado retome esta legislación y la apruebe lo antes posible».
En un mensaje de Twitter el jueves por la tarde, Schumer dijo que la legislación «será el mayor paquete para luchar contra la crisis climática jamás aprobado por el Congreso».
«Los republicanos quieren quitarle a la población la asistencia sanitaria, recortar los impuestos a los ricos, poner a Medicare y a la Seguridad Social en la guillotina, subir los impuestos a las familias trabajadoras», escribió el senador en otro mensaje de Twitter. «Los demócratas están trabajando para bajar la inflación, reducir los costos de los medicamentos, cerrar las lagunas fiscales que explotan las grandes empresas».
El líder republicano, Mitch McConnell (R-Ky.), señaló su oposición al paquete de gastos.
«Incluso la estimación favorita de los demócratas dice que su llamado proyecto de ley sobre la inflación tardará nueve años en reducir la misma cantidad de inflación que nuestro país añadió cada semana en junio», escribió el senador en Twitter el 3 de agosto. «Nueve años de enormes alzas de impuestos y grandes gastos para eliminar literalmente una semana de inflación. Esto es una broma».
«Los demócratas quieren subir las facturas de electricidad, gas y calefacción de las familias para poder enviar a los ricos rebajas por comprar coches eléctricos de 80,000 dólares. Nuevos impuestos sobre el petróleo y el gas estadounidenses», indicó McConnell en otro mensaje de Twitter. «Costosa ventaja que se revela sin impacto significativo en las emisiones mientras China sigue emitiendo más y más».
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