El director de cine Spike Lee teme a la inteligencia artificial (IA) y los expertos en tecnología afirman que tanto él como otros artistas tienen motivos para estar preocupados.
Lee expuso su opinión sobre la IA durante una conferencia en el Museo de Arte Gibbes de Charleston, Carolina del Sur, que se retransmitió en directo por YouTube.
«A veces, la tecnología puede ir demasiado lejos», dijo Lee a un miembro del público que le había preguntado sobre el impacto de la IA en el cine tradicional. «A mí me da miedo».
Lee saltó a la fama nacional en la década de 1980 después de que su primer largometraje, «She’s Gotta Have It», se convirtiera en un éxito de taquilla y ganara 7.1 millones de dólares.
También es conocido por dirigir «Haz lo correcto» en 1989, «BlacKkKlansman» en 2018 y el próximo remake en 2024 del thriller japonés «High and Low».
«Hay un gran problema ahora, especialmente con el Gremio de Escritores, que están tratando de que los estudios y las cadenas de televisión acuerden no tener estas computadoras escribiendo guiones», dijo Lee. «Da miedo».
El Gremio de Escritores de estados Unidos (WGA) estuvo en huelga el año pasado desde mayo de 2023 hasta finales de septiembre de 2023 y la inteligencia artificial estuvo entre los temas negociados.
El sindicato de escritores de cine y televisión, teme que sus miembros sean ignorados y sustituidos por la IA, según Zack Kim, CEO y fundador de Cartha AI, una empresa que desarrolla plataformas de terapia con inteligencia artificial.
«La IA se percibe sobre todo como algo que podría generar muchas consecuencias imprevistas e indeseables para toda la industria del entretenimiento», declaró Kim a The Epoch Times.
El WGA no respondió a las peticiones de comentarios, pero Kim cree que los guionistas temen que a los estudios y las cadenas de televisión les resulte más fácil utilizar la IA para generar ideas de historias en lugar de seres humanos.
«La preocupación por el desplazamiento de puestos de trabajo y la reducción de costos hasta el punto de pagar por la IA para crear un producto en lugar de un ser humano vivo son sólo la punta del iceberg», dijo.
Aunque la huelga de la WGA del año pasado resultó fructífera para los miembros del sindicato, la tecnología de la IA avanza rápidamente desde entonces.
«El sindicato y la industria necesitan seguir debatiendo y reforzando las protecciones cuando sea necesario», declaró a The Epoch Times Edward Tian, Director General de GPTZero.
GPTZero es un software capaz de detectar si el texto fue generado por humanos o por una máquina.
Lee también lamentó que la IA en la industria musical parezca estar más avanzada.
«Ya es algo que está fuera de lo común para la música», dijo. «Crees que estás escuchando a Michael Jackson y ni siquiera es él o Prince. Es inteligencia artificial. Me asusta lo que puedan hacer con eso y luego hacerlo pasar por auténtico».
En junio, Sony Music, Universal Music Group y Warner Records demandaron a las empresas de inteligencia artificial Suno y Udio alegando que los usuarios cometen infracciones masivas de derechos de autor cuando generan voces que no se distinguen de las de músicos como Michael Jackson, Bruce Springsteen y ABBA.
«Con la tecnología de IA en marcha, la línea que separa la interpretación real de la artificial se desplaza aún más, poniendo en entredicho las consideraciones éticas de un artista y su legado», declaró a The Epoch Times el fundador de Zibtek, Cache Merrill.
Zibtek, una empresa con sede en Salt Lake City, crea aplicaciones de software, web y móviles personalizados para empresas.
Lee expresó además su preocupación por los avances de la IA en las plataformas de las redes sociales.
«Estuve en Instagram y tenían estas cosas donde un tercio inferior decía que era IA, pero lo que la gente decía era exactamente lo contrario a lo que eran estas personas, así que no sabes qué es qué» alegó Lee.
Los subtítulos de vídeo del tercio inferior que aparecen en Instagram también se describen como resultados de inteligencia artificial en tiempo real.
Instagram no respondió a las solicitudes de comentarios.
Kim aconseja documentar los contenidos engañosos o falsos mediante la función de denuncia integrada en Instagram.
«El problema con la inteligencia artificial es que cuando dice algo, no hay forma de saber de dónde sacó la idea ni a quién o qué consultó para respaldar o refutar sus afirmaciones», explica.
Otras contramedidas son utilizar Instagram únicamente con una presencia verificada y registrar las marcas y derechos de autor de la imagen, la voz y el estilo individuales.
«En un mundo perfecto, esto significaría que cualquier contenido generado por IA que imite a alguien sin permiso estaría fuera de los límites legales», dijo a The Epoch Times Ben Clayton, director ejecutivo de la empresa de mejora de audio y vídeo Media Medic, con sede en Missouri. «Además, trabajar con empresas y plataformas tecnológicas para crear una marca de agua digital podría ayudar a rastrear cualquier uso no autorizado, haciendo más difícil que las falsificaciones generadas por IA se hagan pasar por auténticas».
Lee declinó hacer comentarios.
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