Una corte federal confirmó la aprobación de un plan de la empresa de Elon Musk, Starlink, para lanzar una nueva flota de satélites, rechazando una impugnación de DISH Network y un grupo ecologista.
Un panel de jueces de la Corte de Apelaciones de EE.UU. para el Distrito de Columbia declaró el 12 de julio que la Comisión Federal de Comunicaciones se adherió correctamente a la ley federal cuando aprobó el plan de Starlink de desplegar 7500 satélites que girarán continuamente alrededor de la Tierra.
La Comisión está facultada para conceder licencias de sistemas de satélites si considera que son de interés público. La comisión concedió la licencia para los satélites Starlink porque consideró que la red mejoraría el acceso a Internet en «regiones desatendidas y subatendidas de Estados Unidos y de todo el mundo».
DISH dijo que los satélites Starlink interferirían con sus propios satélites y que la aprobación estaba erróneamente condicionada a la verificación pendiente de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT).
La Asociación Internacional de Cielo Oscuro dijo que la Comisión debía realizar un estudio medioambiental para evaluar la contaminación lumínica de los satélites antes de conceder la autorización.
La corte de apelaciones dijo que era razonable que la Comisión Federal de Comunicaciones concediera a SpaceX una licencia condicional a la espera de la verificación de la UIT, en parte porque hay un retraso de solicitudes ante la unión. El panel de jueces también dictaminó que la comisión no delegó ilegalmente autoridad a la unión, una agencia de las Naciones Unidas.
!Pedir a la UIT que verifique el cumplimiento de los límites de potencia por parte de un solicitante es una aportación legítima de una parte externa porque se trata de una ‘recopilación de hechos’ no discrecional», dijo el juez Neomi Rao, que escribió para el panel unánime.
«Es importante señalar que una decisión favorable de la UIT no implica automáticamente la concesión de una licencia. La Comisión debe considerar una serie de factores, entre ellos las interferencias de los satélites, para determinar si una licencia es de interés público. Tras recibir el dictamen de conformidad de la UIT, la Comisión toma la decisión final sobre la concesión de una licencia», añadió más tarde el juez.
El recurso de la Asociación Internacional del Cielo Oscuro también fue desestimado porque, según los jueces, el grupo no demostró que las acciones de la Comisión fueran arbitrarias, caprichosas o ilegales.
La legislación federal permite a los organismos optar por no realizar estudios ambientales si determinan que las licencias no tendrán un impacto ambiental significativo. Según la decisión, la comisión determinó que la red de satélites no tendría un impacto ambiental significativo, por lo que quedó exenta de revisión ambiental.
La aprobación condicional era para 7500 satélites, después de que SpaceX solicitara una licencia para explotar 29,988 satélites.
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