El redactor jefe de la revista Forbes, Steve Forbes, advirtió que Estados Unidos sufrirá turbulencias económicas el próximo año, afirmando que a algunos estadounidenses les espera un viaje potencialmente «agitado».
El Sr. Forbes, excandidato presidencial republicano en 1996 y 2000, dijo a Newsmax que cree que la Reserva Federal está operando erróneamente bajo la creencia de que «la prosperidad causa inflación» y que, junto con «la incertidumbre en el mercado», la «economía se enfrenta a serios vientos en contra de la inversión».
«Hay vientos en contra ahí fuera», dijo el Sr. Forbes, añadiendo que en 2024 habrá «turbulencias» para los consumidores. «Los consumidores no van a olvidar que los precios son más altos hoy que cuando Joe Biden asumió el cargo», agregó.
Forbes afirmó entonces que la Reserva Federal está intentando apoyar al presidente Joe Biden antes de las elecciones presidenciales con su régimen de endurecimiento monetario. El banco central mantuvo a principios de este mes las tasas de interés estables en un rango objetivo de entre el 5.25 y el 5.5 por ciento.
«La Fed ahora mismo está intentando ayudar a Joe Biden el año que viene, pero no creo que funcione», dijo refiriéndose a la economía.
La inflación ha mostrado algunos signos de disminución en los últimos meses, y la Oficina de Estadísticas Laborales reveló este mes que el índice de precios al consumo aumentó un 0.1 por ciento sobre una base desestacionalizada en noviembre de 2023. En los últimos 12 meses, el índice aumentó un 3.1%.
El viernes, el indicador favorito de la Reserva Federal para la inflación publicado por el Departamento de Comercio de EE. UU. mostró que los precios al consumidor en EE. UU. cayeron un 0.1 en noviembre y subieron un 2.6 por ciento desde noviembre de 2022.
Aumenta la confianza
Las previsiones de consenso de los principales bancos, incluidos Goldman Sachs, Morgan Stanley, UBS y Barclays, apuntan a que el crecimiento mundial se verá limitado en 2024 por las elevadas tasas de interés, el encarecimiento del petróleo y el debilitamiento de China, pero con escasas probabilidades de recesión. Hace un año, muchos bancos pronosticaban una recesión en Estados Unidos.
Pero las empresas son más pesimistas que el año pasado. En su recopilación de los comentarios de la dirección de 150 llamadas de resultados de la temporada de presentación de informes del tercer trimestre, Deutsche Bank dijo el mes pasado que las empresas caracterizaban en general la demanda como algo débil, pero no de forma alarmante. Las empresas han seguido recortando inventarios para adaptarse a la escasa demanda de bienes.
El director financiero de Walmart, John David Rainey, declaró en una conferencia de Morgan Stanley sobre consumo y comercio minorista a principios de mes que la empresa no pretendía dar la voz de alarma, pero que la cautela era «ciertamente una desviación de lo que vimos en los tres primeros trimestres del año».
Otros analistas afirman que la recesión estadounidense que habían pronosticado durante dos años ya no se avecina. Todos los demás, desde las empresas hasta los inversores, siguen preparándose para una desaceleración causada por la tibia demanda de los consumidores.
«Hay que tener cuidado a la hora de medir la eficacia de algunas de estas previsiones de los vendedores», dijo Patrick McDonough, gestor de carteras de PGIM Quantitative Solutions, según Reuters. «Yo estaría un poco más del lado de las empresas».
El Conference Board dijo el miércoles que su índice de confianza que mide cómo los estadounidenses se sienten acerca de las condiciones de negocios y el mercado de trabajo aumentó en diciembre.
«El aumento de la confianza de los consumidores en diciembre reflejó valoraciones más positivas de las actuales condiciones empresariales y de la disponibilidad de empleo, así como opiniones menos pesimistas de las perspectivas empresariales, del mercado laboral y de los ingresos personales para los próximos seis meses», dijo Dana Peterson, economista jefe del Conference Board.
Añadió que «aunque el renovado optimismo de diciembre se observó en todas las edades y niveles de ingresos de los hogares, las ganancias fueron mayores entre los hogares de 35 a 54 años y los hogares con niveles de ingresos de 125,000 dólares o más».
Según la Junta, los consumidores también creen que hay menos probabilidades de que EE. UU. entre en recesión el año que viene, ya que dicen que está en «el nivel más bajo visto» hasta ahora en 2023. Sin embargo, dos tercios de los estadounidenses creen posible una recesión económica en 2024.
En 2022, hubo una serie de advertencias de que las subidas de tipos de la Reserva Federal aumentarían el desempleo y acabarían con la demanda en EE. UU. Mientras tanto, una serie de importantes quiebras bancarias que comenzaron a principios de 2023 echaron más leña al fuego sobre los posibles problemas económicos.
Con información de Reuters.
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