Un submarino estadounidense de propulsión nuclear llegó a la Bahía de Guantánamo, Cuba, como parte de lo que las autoridades dijeron que era una visita previamente planificada. Esto ocurrió un día después de que una flota de buques de guerra rusos llegara a la isla como parte de sus ejercicios militares en la región.
El USS Helena, un submarino de ataque rápido, llegó a la base naval para «una visita rutinaria al puerto en su tránsito por el área geográfica de responsabilidad del Comando Sur de Estados Unidos», dijo el Comando Sur de Estados Unidos en X.
El tránsito del submarino de clase Los Ángeles estaba «previamente planeado», dijeron los militares.
La visita se produjo un día después de que la fragata rusa Almirante Gorshkov, el submarino de propulsión nuclear Kazan, el petrolero de flota Pashin y el remolcador de rescate Nikolay Chiker, arribaran al puerto de La Habana. El puerto se encuentra a 95 millas náuticas (109 millas) del puerto de Key West, Florida, donde el ejército estadounidense opera una estación aeronaval.
De camino a Cuba, los buques rusos realizaron un ejercicio de «armas de misiles de alta precisión» en el Océano Atlántico, simulando un ataque contra un enemigo a 600 kilómetros (372 millas) de distancia, dijo el ministerio de Defensa de Rusia en una declaración publicada el 12 de junio en Telegram.
El Departamento de Defensa de Estados Unidos restó importancia a la visita de los buques de guerra rusos a Cuba, y la portavoz del Pentágono, Sabrina Singh, afirmó que es consistente con «visitas navales de rutina que hemos visto bajo diferentes administraciones».
«Hemos estado siguiendo los planes de los rusos para esto. No es una sorpresa. Les hemos visto hacer este tipo de escalas en el puerto antes», dijo la Sra. Singh en una conferencia de prensa.
«Siempre, constantemente, vamos a vigilar cualquier buque extranjero que opere cerca de las aguas territoriales de Estados Unidos. Por supuesto, nos lo tomamos en serio, pero estos ejercicios no suponen una amenaza para Estados Unidos», añadió la portavoz.
El ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba afirmó anteriormente que los cuatro buques rusos no portarían armas nucleares durante su visita al Caribe del 12 al 17 de junio.
El ministerio indicó que los marinos rusos se reunirán con funcionarios del gobierno cubano y visitarán lugares de «interés histórico y cultural», además de realizar otras «actividades».
«Ninguno de los navíos es portador de armas nucleares, por lo que su escala en nuestro país no representa una amenaza para la región», dijo el ministerio en una declaración del 6 de junio.
Rusia es un viejo aliado de Venezuela y Cuba, y sus buques y aviones de guerra se han aventurado periódicamente en el Caribe.
La misión estadounidense se desarrolla menos de dos semanas después de que el presidente Joe Biden autorizara a Kiev a utilizar armas proporcionadas por Estados Unidos para atacar dentro de Rusia con el fin de proteger Járkiv, la segunda ciudad más grande de Ucrania, lo que llevó al presidente Vladimir Putin a sugerir que su ejército podría responder con medidas similares en otras partes del mundo.
Sin embargo, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, declaró el 13 de junio que no hay motivo para que Estados Unidos y otros países se preocupen por la presencia de buques de guerra rusos en Cuba, ya que «este tipo de visitas son una práctica habitual», según el medio de comunicación estatal TASS.
Los barcos rusos han atracado ocasionalmente en La Habana desde 2008. Ese año, un grupo de buques rusos entró en aguas cubanas, en lo que los medios estatales describieron como la primera visita de este tipo en casi dos décadas.
En 2015, un barco de reconocimiento y comunicaciones llegó sin previo aviso a La Habana un día antes de las discusiones entre funcionarios estadounidenses y cubanos sobre la reapertura de relaciones diplomáticas.
Con la contribución de Jack Phillips e información de The Associated Press.
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