La expresión china 貪小失大 (tān xiǎo shī dà) significa «sufrir grandes pérdidas debido a la codicia por pequeñas ganancias». La frase se origina en el Período de los Reinos Combatientes (戰國時代) (475–221 A.C.) de Zhou Oriental (東周) (770–221 B.C.), la segunda parte de la Dinastía Zhou (周朝).
El General Yue Yi (樂毅) del estado de Yan (燕國) condujo las fuerzas conjuntas de Yan y otros estados al ataque contra el estado de Qi (齊國), el cual estaba siendo gobernado en aquel tiempo por un rey brutal.
El rey de Qi envió al General Chu Zi (觸子) a conducir el ejército de resistencia, pero fueron superados vastamente en número y Chu Zi se vio en un gran problema.
Cuando Chu Zi se acercó al rey por la situación, el rey le respondió humillándolo y amenazándolo, forzándolo a la batalla. Chu Zi fue a la guerra en disconformidad y dejó que el ejército de Qi sufriera una derrota mientras él aprovechaba para huir.
El estado de Qi envió entonces a otro general, Da Zi (達子), para que conduzca lo que quedaba del ejército.
Estacionados en las puertas de la capital de Qi, Da Zi le pidió al rey incentivos en oro para apoyar la moral de las tropas del ejército. Sin embargo, el rey no sólo se rehusó, sino que lo maldijo furiosamente por ser tonto, débil e incompetente.
Como resultado, Da Zi y sus tropas fueron derrotados en la batalla contra el ejército de Yan. No sólo fue asesinado Da Zi, sino que también el rey debió huir mientras el ejército de Yan tomaba posesión de todo el oro del tesoro de Qi.
La frase se usa para aconsejar a la gente a no manejarse con codicia y perseguir pequeñas cosas mientras se desperdicia y se es extravagante en los asuntos importantes, ignorando lo que vale la pena y es valioso en el panorama general.
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