La tasa de homicidios en México incrementó un tercio en el último año, situándose entre los doce países más asesinos del mundo, con cuatro muertos cada hora.
Es el segundo año consecutivo que la tasa de homicidios batió récords previos. Información del Ministerio del Interior enumeró 33.341 casos de asesinatos en 2018, en comparación con los 25.036 casos de 2017.
Con una población de 130 millones de habitantes en México, la tasa anual de asesinatos es de unos 25 por cada 100.000 habitantes, en comparación con los cerca de cinco asesinatos por cada 100.000 habitantes en Estados Unidos.
Los 33.341 casos no incluyen la categoría de «homicidio culposo», que añade otras 17.000 muertes.
La creciente tasa de mortalidad en México la sitúa en un nivel más alto y, por primera vez este año, se encuentra entre los 20 países con las tasas más altas de incidencia de homicidios, según el Foro Económico Mundial.
El aumento de los asesinatos está vinculado a la violencia de los carteles de drogas, que continúa aumentando a pesar de la ofensiva militarizada que comenzó hace 12 años.
El estado de Guanajuato, que se encuentra en el centro del país, ha sido el más afectado por las guerras de territorio entre pandillas, que elevaron la tasa de homicidios de 1084 a 3290 en sólo un año.
El fin de semana, tres asaltantes mataron a tiros a siete personas en una casa del balneario mexicano de Cancún, una ciudad costera que es golpeada por el aumento de la violencia relacionada con las drogas.
El tiroteo fue una disputa entre narcotraficantes callejeros, reportó The Associated Press.
Un presunto líder de la pandilla que fue vinculado al cartel de Jalisco estuvo detrás de los asesinatos, según la policía.
El cartel de Jalisco es de la costa del Pacífico y ha estado tratando de apoderarse de actividades ilegales en el otro lado del país, en Cancún y otros centros turísticos del sur.
En un solo día de agosto, fueron encontrados ocho cadáveres por la policía de Cancún, esparcidos por las calles.
250 Cráneos Humanos
A unos 70 kilómetros de distancia, la ciudad de Playa del Carmen, situada en la ruta de los cruceros, creció con el comercio turístico en los últimos años. Pero ese crecimiento trajo a las pandillas y las drogas.
A principios de este mes, siete personas fueron asesinadas en un tiroteo en un bar de la ciudad.
Al otro lado del país, otra tranquila comunidad costera en el Pacífico, Tecomán, se convirtió en el lugar más peligroso de México con una tasa de asesinatos de 172/100.000 el año pasado.
El año pasado se encontró una fosa común en el centro de México, con más de 250 cráneos humanos. Los restos fueron probablemente de víctimas de los carteles de la droga a lo largo de los años, según las autoridades.
La tumba, encontrada en el estado de Veracruz, se cree que es la más grande de México. La tasa de homicidios de México, de 25 por cada 100.000 habitantes, sigue siendo baja en comparación con muchos otros países de América Central y del Sur, según datos del Banco Mundial.
El Salvador tenía la tasa de asesinatos más alta del mundo en 2016, con 84, y Honduras y Venezuela en segundo y tercer lugar con 57 y 56 respectivamente.
Brasil, Guatemala y Belice también están entre los 10 primeros, junto con Jamaica y Sudáfrica.
Doce periodistas fueron asesinados en México en 2018.
Se espera que la tasa de asesinatos en Estados Unidos disminuya en 2018, según un informe del The New York Times, después de haber aumentado en casi un cuarto entre 2014 y 2016 y haberse estabilizado en 2017.
El recién investido presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se comprometió a revisar la manera en que México aborda el problema de las drogas.
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