El senador Ted Cruz (R-Texas) presentó un proyecto de ley que evitaría que el Consejo del Distrito de Columbia use fondos federales para permitir que los no ciudadanos, incluidos los inmigrantes ilegales, voten en las elecciones locales (pdf).
«Votar es un derecho y un privilegio distinto que disfrutan los ciudadanos estadounidenses en Estados Unidos. Es una responsabilidad que no debe ser tratada a la ligera y debe ser protegida», escribió Cruz en Twitter. «Los votantes deciden no sólo quién dirigirá nuestro país, nuestras ciudades y comunidades, sino también cómo deben gastarse nuestros impuestos y qué políticas debemos adoptar”.
Cruz continuó diciendo que permitir que los no ciudadanos y los inmigrantes ilegales voten en las elecciones de EE.UU. “abre nuestro país a la influencia extranjera y permite que aquellos que violan abiertamente las leyes de EE.UU. o, incluso, trabajan para gobiernos extranjeros hostiles se aprovechen y dirijan nuestros recursos en contra de nuestra voluntad”.
El 4 de octubre, en una votación de 12 a 1, el consejo de distrito aprobó un proyecto de ley para permitir que los no ciudadanos, que hayan residido en el distrito durante al menos 30 días, voten en las elecciones locales. El proyecto de ley fue enviado a la alcaldesa demócrata Muriel Bowser para su aprobación. Si la alcaldesa aprueba el proyecto de ley, debe enviarse al Congreso para una revisión por 30 días antes de que pueda entrar en vigencia como ley bajo la Ley de Autonomía de D.C.
La oficina de Bowser no respondió a una solicitud de comentarios de The Epoch Times.
Los concejales argumentaron que todos los residentes, independientemente de su estatus de ciudadanía, deberían poder votar en las elecciones comunitarias.
“Nuestros vecinos inmigrantes de todos los estados participan, contribuyen y se preocupan por nuestra comunidad y nuestra ciudad. Ellos, como todos los residentes de DC, merecen tener derecho a opinar en su gobierno”, dijo el concejal demócrata Charles Allen durante una reunión del consejo el 4 de octubre.
“Ellos crían familias aquí, contribuyen a su comunidad, administran negocios de los que depende la gente y pagan impuestos que nosotros decidimos cómo gastar”, dijo Allen. “Sin embargo, no tienen la capacidad de elegir líderes locales que tomen decisiones sobre sus cuerpos, sus negocios y el dinero de sus impuestos”.
Preocupación por la regla de residencia corta
La concejal demócrata Mary Cheh, que disintió, dijo que no se oponía a la votación en función del estado de ciudadanía de un residente, sino más bien de la duración del requisito de residencia, explicando que debería ser más de 30 días.
“¿Podría alguien que tomó el autobús desde Texas, o que subieron al autobús desde Texas o donde sea, y lo dejaron en la propiedad de la vicepresidente, y luego permaneció como residente en el Distrito de Columbia durante 30 días y tenía 18 años, podría esa persona luego votar en nuestras elecciones locales?”, dijo Cheh.
«La preocupación aquí no es en absoluto si la persona es un ciudadano. La preocupación no es en absoluto su estatus migratorio, ya sea legal o ilegal. Se trata de saber si alguien que es un completo desconocido para nuestra comunidad, para nuestra nación, y que casualmente fue enviado aquí en un autobús desde Texas y logró permanecer como residente durante 30 días, puede votar en nuestras elecciones», dijo.
El proyecto de Cruz se presentó tras una resolución presentada por el senador Tom Cotton (R-Ark.), quien dijo que el estatuto de DC es una «locura».
“Recordatorio: Washington D.C. quiere permitir que los inmigrantes ilegales voten en las elecciones. Esto es una locura. Tengo una resolución con el @LeaderMcConnel que los detendrá y registrará a todos los demócratas que busquen otorgarles a los inmigrantes ilegales el derecho al voto”, escribió Cotton en Twitter en octubre.
La oficina de Cruz no respondió a una solicitud de comentarios.
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