Un hombre de 73 años se convirtió en la primera muerte relacionada con el terremoto de magnitud 6,6 que este martes 7 de enero despertó de forma abrupta a los puertorriqueños y dejó sin servicio eléctrico a la totalidad de la isla caribeña.
La Policía de Puerto Rico confirmó que el hombre murió al recibir el impacto de una pared de su vivienda en Ponce, la principal ciudad del sur del territorio caribeño.
La información facilitada por la Policía indica que el suceso se registró en la urbanización Jardines del Caribe de Ponce, donde la pared cedió debido a los daños provocados por el temblor.
La gobernadora de Puerto Rico, Wanda Vázquez, lamentó la muerte del hombre en declaraciones a medios locales, además de mostrar su pesar por el incidente.
En Ponce un derrumbe en la carretera PR-2, a la altura del sector Las Cucharas, provocó un corte de la circulación, aunque el incidente no causó accidentes entre los conductores que transitaban por el área.
Las infraestructuras en la isla, a excepción del sistema eléctrico, se mantienen operativas a la espera de un examen más pormenorizado que se llevará a cabo durante las próximas horas.
El Aeropuerto Luis Muñoz Marín de San Juan mantiene sus operaciones con normalidad.
«Al momento estamos operando con generadores eléctricos y las operaciones aéreas están con normalidad, para conocer el estatus de su vuelo sugerimos que contacte a su aerolínea», informó el aeropuerto sanjuanero a través de las redes sociales.
Tras el primer temblor de magnitud 6,6 le han seguido otras réplicas de alta intensidad y no se descartan que durante las próximas horas se sientan nuevos sismos, que desde el pasado 28 de diciembre se registran con especial virulencia en el suroeste de Puerto Rico.
La Autoridad de la Energía Eléctrica (AEE) espera recuperar el servicio, al menos de forma parcial, durante las próximas horas y estar cerca de la totalidad del restablecimiento al mediodía.
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