Texas apeló una orden judicial dictada el miércoles que bloqueaba temporalmente al estado para aplicar una ley de aborto que entró en vigor el mes pasado.
«No estamos de acuerdo con la decisión de la Corte y ya hemos tomado medidas para apelar inmediatamente ante el Tribunal de Apelaciones del Quinto Circuito», escribió en Twitter el jueves por la mañana el fiscal general de Texas, el republicano Ken Paxton. «La santidad de la vida humana es, y siempre será, una prioridad máxima para mí».
A las pocas horas del fallo, Texas notificó al Tribunal de Apelaciones del Quinto Circuito que impugnará la orden del juez, sentando las bases para la siguiente fase de la batalla legal.
El juez del Tribunal de Distrito de EE.UU. Robert Pitman, nombrado por el expresidente Barack Obama, estuvo de acuerdo con los argumentos presentados por el gobierno de Biden para bloquear la aplicación de la ley, conocida como Proyecto de Ley 8 del Senado. Dijo que los legisladores de Texas diseñaron un plan para eludir lo que describió como protecciones constitucionales para las mujeres que desean abortar.
La ley entró en vigor el 1 de septiembre y prohíbe los abortos después de unas seis semanas de embarazo, o cuando se detecta la actividad cardíaca del embrión. La medida, que la Corte Suprema de EE.UU. se negó a bloquear, da a los particulares la posibilidad de presentar demandas contra el personal médico que realiza abortos o contra las personas que prestan asistencia a las mujeres que intentan interrumpir su embarazo después de la sexta semana.
«Desde el momento en que la S.B. 8 entró en vigor, a las mujeres se les ha impedido ilegalmente ejercer el control sobre sus vidas en formas que están protegidas por la Constitución», escribió Pitman en su orden. «Que otros tribunales puedan encontrar una forma de evitar esta conclusión es algo que tienen que decidir; este Tribunal no sancionará ni un día más esta ofensiva privación de un derecho tan importante».
El grupo provida Texas Right to Life reaccionó a la sentencia a última hora de la noche del miércoles, diciendo que «no estaba sorprendido» por el fallo de Pitman.
«Este es el legado de Roe v. Wade: Jueces que atienden a la industria del aborto, elaborando una conclusión primero y buscando en las profundidades de la literatura legal una justificación después», dijo la organización en Twitter, refiriéndose a la histórica decisión de la Corte Suprema. «Se espera que los abogados provida apelen la decisión inmediatamente, en la que esperamos una audiencia justa», continuó.
El Departamento de Justicia de Biden demandó a Texas aproximadamente una semana después de que la ley entrara en vigor, el 9 de septiembre, y solicitó una orden judicial temporal contra la ley.
Varios altos funcionarios del gobierno de Biden elogiaron el fallo de Pitman, incluido el fiscal general Merrick Garland—quien dijo que era una «victoria para las mujeres de Texas».
«El fallo de esta noche es un paso importante hacia la restauración de los derechos constitucionales de las mujeres en todo el estado de Texas», dijo el miércoles la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Psaki, en un comunicado. «La lucha no ha hecho más que empezar, tanto en Texas como en muchos estados de este país en los que los derechos de las mujeres están actualmente bajo ataque», continuó diciendo.
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