Los trabajadores de la ciudad de Boston ganaron la demanda que pedía suspender la orden de vacunación de la alcaldesa Michelle Wu.
La jueza de la Corte de Apelaciones de Massachusetts emitió una medida cautelar que prohíbe a la ciudad aplicar la orden de vacunación del 20 de diciembre de 2021 a los miembros de sindicatos de policías y bomberos de Boston.
El fallo anuló una sentencia anterior de un tribunal inferior que mantenía la orden en vigor. La medida cautelar regirá indefinidamente.
En una opinión de 18 páginas, la jueza Sabita Singh concluyó que una medida cautelar contra la orden de vacunación suponía un bajo riesgo para el público, mientras que su denegación supondría la pérdida de empleados públicos esenciales.
«Dado el escaso daño para la ciudad y el interés de la salud pública que pretende promover y el daño sustancial que probablemente sufrirán los sindicatos en ausencia de una medida cautelar, la balanza de perjuicios favorece la emisión de una medida cautelar para preservar el statu quo», escribió Singh.
El fallo se produce menos de dos semanas después de que la alcaldesa demócrata, Wu, diera una rueda de prensa en la que prometió reafirmar la intención de su oficina de hacer cumplir la orden de vacunación dirigida a los trabajadores de la ciudad tras el fracaso de las negociaciones con los sindicatos de policías y bomberos de Boston. Fuera de la conferencia de prensa, los bomberos de Boston corearon «déjennos trabajar» en señal de protesta.
En una declaración escrita enviada a The Epoch Times el 16 de febrero, Wu hizo hincapié en las sentencias judiciales que apoyan las órdenes de vacunación de los empleados públicos.
«Más del 95 por ciento del personal de la ciudad está vacunado gracias a la política que hemos promulgado. Nuestros trabajadores y residentes que dependen de los servicios de la ciudad merecen estar protegidos», dijo Wu en su declaración.
La Corte dejó en vigor los requisitos de las pruebas de detección de COVID-19 para los trabajadores de la ciudad.
La medida cautelar fue solicitada por el sindicato Local 718 de los Bomberos de Boston, la Federación de Oficiales Superiores de la Policía de Boston y la Sociedad Benéfica de Detectives de la Policía de Boston. Los tres sindicatos no devolvieron las llamadas pidiendo comentarios.
«La decisión del juez Singh demuestra que, cuando se deja de lado la retórica inverosímil y las declaraciones en las redes sociales, la ley y los hechos están de nuestro lado», dijo el sindicato de bomberos de Boston en una declaración.
La sentencia de Massachusetts es la continuación de varias medidas que buscan relajar las órdenes de vacunación contra COVID-19 en Massachusetts. El estado había impuesto algunos de los mandatos más restrictivos por COVID a lo largo de la pandemia.
Boston se encuentra entre varias ciudades estadounidenses que impusieron pasaportes de vacunación para los interiores, como en los restaurantes. Wu indicó recientemente que está considerando la posibilidad de rescindir el requisito ya que los casos positivos de COVID en Massachusetts están disminuyendo.
La semana pasada, el gobernador de Massachusetts, el republicano Charlie Baker, anunció que el estado levantaría el requisito de mascarillas en las escuelas a finales de mes.
El estado también cambió recientemente su recomendación de que todos lleven mascarilla, independientemente de su estado de vacunación, para recomendar que únicamente lo hagan los que no estén totalmente vacunados contra COVID-19.
Aunque Massachusetts, el hogar de los Kennedy, fue durante mucho tiempo un estado demócrata, una activa red de conservadores ha liderado grandes protestas contra los mandatos relacionados a COVID-19.
El año pasado, docenas de policías estatales de Massachusetts renunciaron en protesta por la orden de vacunación.
También han surgido varios grupos conservadores en la zona de Boston, como Free The Hub, Boston First Responders United y Massachusetts Says No. Algunos miembros de estos grupos han estado protestando frente a la casa de Wu desde que anunció que iba a implantar el pasaporte de vacunas.
La ciudad también acoge tres populares programas de radio conservadores. Uno de ellos, el de Jeff Kuhner, que ocupa el popular espacio matutino entre los viajeros de Boston, organizó manifestaciones frente a la sede del Estado en Boston a las que asistieron miles de personas.
En el estado de la Bahía también se han producido pequeños actos de violencia a causa de los mandatos por COVID-19. En enero, un hombre propinó un puñetazo al encargado de la Pizzeria Regina, un emblemático local del barrio italiano del North End de Boston, después de que el encargado le exigiera una mascarilla o abandonara el restaurante.
Durante la misma semana de la agresión, agentes de policía con opiniones opuestas en el debate de la orden de vacunación contra COVID-19 se enzarzaron en un altercado verbal después de que un empleado de otra Pizzeria Regina llamara a los oficiales para denunciar a un sargento fuera de servicio que se negaba a mostrar un pasaporte de vacunación en el restaurante.
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