Las tropas lideradas por Estados Unidos se retiraron de la base iraquí de Taji, que sufrió los ataques con misiles a principios de año. La instalación se entregó a las fuerzas de seguridad de Irak durante el fin de semana.
La coalición confirmó el traslado el domingo en un comunicado.
«El movimiento del personal militar de la coalición es parte de un plan de largo alcance coordinado con el gobierno de Irak», dijo la Fuerza de Tarea Conjunta Combinada, Operación Resolución Inherente (CJTF-OIR).
El Campamento Taji, situado a unas 50 millas (80 kilómetros) al norte de la capital de Irak, Bagdad, es un lugar privilegiado para el entrenamiento, añade el comunicado. Las tropas de la coalición fueron enviadas allí para combatir el aumento de la presencia del grupo terrorista ISIS en Irak y Siria, pero la base fue atacada por las milicias de la región apoyadas por Irán, las que varias veces en 2020 dispararon cohetes hacia la instalación.
«Este es realmente un día histórico», dijo el general de División Kenneth Ekman, el comandante adjunto del grupo de trabajo. «Durante los últimos seis años, el Campamento Taji ha servido como instalación principal para que los socios de la Coalición entrenen al ejército iraquí, a la Fuerza Aérea Iraquí y al Qwat al-Khasah. Los esfuerzos de la Coalición permiten a los iraquíes entrenarse a sí mismos. Desde este día, las Fuerzas de Seguridad de Irak (ISF) asumirá la responsabilidad total de las instalaciones y los programas de Taji y continuará usando el sitio para dirigir y llevar a cabo el entrenamiento como parte de su misión para derrotar a los remanentes del Daesh».
Unos 2000 miembros de la coalición se estacionaron históricamente en el Campamento Taji, pero muchos de ellos se fueron durante el verano. El resto de las tropas de la coalición se irán días después de que la base y el equipo se entreguen a las fuerzas de seguridad iraquíes, informó la coalición.
El anuncio del domingo marca la octava transferencia de una parte de una base iraquí a las fuerzas iraquíes, por parte de la coalición.
La retirada ocurre días después de que el presidente Donald Trump declarara que retiraría los soldados estadounidenses de Irak, en una reunión con el primer ministro de Irak. Estados Unidos tienen aproximadamente 5000 soldados en Irak, mientras que unos 2500 efectivos de las tropas de la coalición siguen en el país.
«Así es como luce el éxito», dijo el general de brigada australiano Simon Johnstone, director de estrategia de la CJTF-OIR, en una declaración. «La transferencia de bases como Taji es parte de nuestro plan de campaña para que la ISF se asegure su propio futuro y defienda la soberanía iraquí. Los tremendos esfuerzos de la ISF y la Coalición demuestran nuestro compromiso compartido por la Coalición y Australia para garantizar la seguridad y la estabilidad de los ciudadanos iraquíes».
A principios de este año, en medio de las crecientes tensiones entre Irán y Estados Unidos, el parlamento iraquí votó a favor de la salida del país de las tropas estadounidenses y otras tropas extranjeras. La votación se produjo después de que Estados Unidos autorizó el ataque aéreo del comandante iraní Qassem Soleimani, quien, según las autoridades, mató a cientos de soldados estadounidenses a lo largo de los años y estaba planeando más ataques contra los activos estadounidenses en la región. Irán lanzó entonces una ráfaga de cohetes contra dos bases iraquíes que albergaban fuerzas estadounidenses, causando docenas de heridos menores.
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