El expresidente Donald Trump llegó a las oficinas de la fiscal general de Nueva York el 13 abril para su segunda declaración en una disputa legal sobre las prácticas comerciales de su empresa.
El republicano tenía previsto reunirse con los abogados de la fiscal general Letitia James, que presentó una demanda contra Trump en 2022.
Según la demanda de James, Trump y su familia engañaron a bancos y socios comerciales proporcionándoles información fraudulenta sobre su patrimonio neto y el valor de sus activos, como hoteles y campos de golf.
La demanda no está relacionada con los cargos penales por delito grave presentados por el fiscal del distrito de Manhattan contra Trump, que dieron lugar a su histórica comparecencia la semana pasada, la primera de un expresidente.
La abogada de Trump, Alina Habba, dijo a The Epoch Times: «El presidente Trump no sólo está dispuesto, sino también ansioso por testificar hoy ante la fiscal general. Se mantiene firme en su postura de que no tiene nada que ocultar, y espera educar a la fiscal general sobre el inmenso éxito de su empresa multimillonaria».
Trump se pronunció en Truth Social sobre su comparecencia, diciendo en un post del 12 de abril que había llegado a la ciudad para «otra injusta y ridícula persecución del 45º presidente de Estados Unidos», llamando a James «racista» y «fiscal general que odia a Trump».
«Construí una gran y próspera empresa, di empleo a miles de personas, levanté magníficas estructuras en todo el mundo, pero particularmente en Nueva York, ¡y ahora tengo que demostrárselo a esta escoria que hizo campaña con la plataforma ‘Atraparé a Trump’, incluso antes de saber nada de mí!», continuó Trump.
Trump se reunió con los abogados de James el 10 de agosto de 2022, pero se negó a responder a todas las preguntas, salvo algunas de procedimiento, invocando su derecho a no autoinculparse, recogido en la Quinta Enmienda.
James presentó una demanda civil contra Trump, la Organización Trump, tres de sus hijos y otras personas por presunto fraude el 21 de septiembre del año pasado.
Su oficina alega en una demanda de 200 páginas que el fraude afectó a todos los aspectos del negocio de la familia Trump, incluidos los campos de golf y otras propiedades.
La demanda también alega que la Organización Trump infló el valor de sus propiedades para engañar a aseguradoras, funcionarios fiscales y prestamistas.
Afirma: «Estos actos de fraude y tergiversación fueron similares en su naturaleza, fueron cometidos por la alta dirección de la Organización Trump como parte de un esfuerzo común para cada declaración anual, y fueron aprobados en los más altos niveles de la Organización Trump, incluido el propio Sr. Trump».
Además del expresidente, la demanda también nombra como demandados a sus hijos, Donald Trump Jr, Ivanka Trump y Eric Trump. La demanda también nombra a Allen Weisselberg, ex director financiero de la Organización Trump, y a Jeff McConney, otro ejecutivo.
Con información de Zack Stieber y Associated Press.
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