MINT HILL, Carolina del Norte— El expresidente Donald Trump dijo el 25 de septiembre que si él estuviera en la Oficina Oval, amenazaría con volar Irán «en pedazos» por las amenazas hechas al candidato republicano.
Sus declaraciones se produjeron después de que la Oficina del Director de Inteligencia Nacional informara a la campaña de Trump el 24 de septiembre sobre amenazas «reales y específicas» de Irán para «asesinar [a Trump] en un esfuerzo por desestabilizar y sembrar el caos en Estados Unidos», informó la campaña.
Durante su gobierno, Trump impuso fuertes sanciones a Irán y ordenó dar muerte al teniente general Qassem Soleimani, comandante de la Fuerza Quds, en enero de 2020. Funcionarios iraníes prometieron vengar el asesinato.
En un acto de campaña en Mint Hill, Carolina del Norte, Trump dijo: «Si yo fuera el presidente, informaría al país amenazante —en este caso, Irán— que si hace algo para dañar a esta persona, vamos a volar en pedazos sus ciudades más grandes, y el país mismo».
«Tenemos que hacerle saber (…) que si atenta contra expresidentes o candidatos a la presidencia, su país volará en pedazos, como se suele decir».
El gobierno de Irán rechazó las acusaciones de que intentó matar a Trump, diciendo que en su lugar buscaba emprender acciones legales contra él por la muerte de Soleimani.
El presidente de Irán, Masoud Pezeshkian, se encuentra de visita en Nueva York con motivo de la 79ª sesión de la Asamblea General de la ONU. La ley federal exige que Pezeshkian, como jefe de Estado extranjero, esté protegido por el Servicio Secreto estadounidense mientras se encuentra en Estados Unidos, una situación que Trump criticó dados los supuestos intentos de Irán de asesinarlo.
Trump no es el primer funcionario estadounidense que supuestamente es objetivo de Irán. El exsecretario de Estado, Mike Pompeo, y el exasesor de seguridad nacional, John Bolton, quienes sirvieron en la administración de Trump y fueron defensores de su política hacia Irán, han enfrentado amenazas continuas del país, lo que prolongó su seguridad proporcionada por el gobierno mucho después de que dejaron el cargo.
«Tenemos al presidente de Irán en nuestro país esta semana. Tenemos grandes fuerzas de seguridad custodiándolo y, sin embargo, ellos están amenazando a nuestro expresidente y al principal candidato a convertirse en el próximo presidente de Estados Unidos: sin duda, un extraño conjunto de circunstancias», dijo Trump.
Irán también organizó ciberataques contra la campaña de Trump, confirmaron las agencias de inteligencia estadounidenses.
A principios de julio, Irán obtuvo datos que más tarde intentó proporcionar a la campaña del presidente Joe Biden. La campaña de Biden no utilizó la información, según las fuerzas de seguridad federales que investigan el incidente.
Los intentos de asesinato contra Trump provocaron un aumento de la seguridad en sus mítines de campaña. Hoy en día, cuando habla al aire libre, Trump lo hace desde detrás de una pantalla de cristal a prueba de balas que rodea su podio.
Trump también se refirió a la investigación en curso sobre dos hombres, el fallecido Thomas Matthew Crooks, y Ryan Wesley Routh, quienes intentaron matar al expresidente el 13 de julio y el 15 de septiembre, respectivamente.
Además, declaró que Apple, que fabrica el iPhone, debería cooperar con la investigación del FBI sobre los atacantes colaborando en el desbloqueo de ciertas aplicaciones de mensajería de texto encriptadas que utilizaron y que, al parecer, han planteado problemas a la investigación.
«El FBI no ha podido abrir las tres apps potencialmente extranjeras. En el segundo caso, el asesino tenía seis teléfonos móviles en su coche y el FBI tampoco pudo penetrar su protección», dijo Trump.
«Ellos quieren saber, y yo quiero saber, a quién ha estado llamando».
El FBI y Apple no respondieron a las peticiones de comentarios al cierre de esta edición.
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