El presidente Donald Trump dijo el viernes que Estados Unidos tendrá suficientes dosis de vacunas COVID-19 para cada estadounidense en abril del próximo año.
Estados Unidos tendrá 100 millones de dosis de vacunas contra el virus del PCCh (Partido Comunista Chino) para fines de 2020, dijo el presidente.
«Cientos de millones de dosis estarán disponibles cada mes y esperamos tener suficientes vacunas para todos los estadounidenses en abril y nuevamente diré que incluso en esa etapa posterior, la entrega se realizará tan rápido como sea posible», dijo Trump en una conferencia de prensa en la Casa Blanca.
«Cantidades masivas» de la vacuna «serán entregadas a través de nuestro gran ejército y el general es uno de los mejores y está listo para hacerlo», agregó. «Estamos nuevamente muy adelantados en la vacuna, creemos que, en algún momento, en un futuro muy cercano, la tendremos», dijo.
El anuncio se produce después de que el director de los Centros para el Control de Enfermedades (CDC) de EE.UU., Robert Redfield, dijera al Congreso que la vacuna no estará ampliamente disponible hasta mediados de 2021. Trump dijo el miércoles que los comentarios de Redfield no eran del todo correctos, diciendo que “bajo ninguna circunstancia será tan tarde como dijo el médico».
El 18 de septiembre, el Dr. Anthony Fauci, experto en enfermedades infecciosas, dijo que «el presidente estaba diciendo que es totalmente concebible que tengamos una respuesta en octubre».
“Mi proyección es que probablemente sea noviembre o diciembre”, dijo Fauci a WTOP. “Digamos que es noviembre, podría comenzar en diciembre y podría comenzar a darse a las personas que están en la (categoría) de alto riesgo, así como a los trabajadores de la salud, vacunas que ya empiezan en diciembre hasta enero y febrero. Por lo tanto, muchas de las personas que realmente necesitarían la vacuna en mayor medida, las más vulnerables, ya podrían recibirlas a principios de año».
El miércoles, los CDC enviaron a los 50 estados un documento que describe el plan de distribución para entregar una vacuna, sin costo, a todos los estadounidenses que la deseen, una vez que se demuestre que es segura y eficaz. Este no es todavía el caso, a pesar de que varias empresas se encuentran en una fase avanzada de pruebas.
El plan de distribución se preparó como parte de la Operación Warp Speed, una iniciativa respaldada por la Casa Blanca con el propósito de tener las vacunas listas para enviarse dentro de las 24 horas posteriores a la concesión de la autorización de uso de emergencia por parte de la Administración de Alimentos y Medicamentos.
El gobierno federal asignará las primeras vacunas en función de las poblaciones críticas de cada estado, recomendadas por los CDC como las poblaciones con mayor riesgo de contraer COVID-19.
Mimi Nguyen-Ly contribuyó a este artículo.
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