La Corte Suprema de Oklahoma dictaminó el viernes que el encuentro de campaña del presidente Donald Trump, que se realizará el sábado en Tulsa, Oklahoma, puede continuar, a pesar de las preocupaciones por el virus PCCh. Por su parte Trump dijo que se levantó el toque de queda implementado por la ciudad.
«Acabo de hablar con el muy respetado alcalde de Tulsa, G.T. Bynum, quien me informó que no habrá toque de queda esta noche o mañana para nuestros partidarios que asistirán al Rally #MAGA”, escribió Trump en Twitter.
Más temprano el mismo día, Bynum escribió en una orden de emergencia que una emergencia civil fue declarada cerca de la arena. Citó las protestas de la oposición y los recientes disturbios civiles por el movimiento, refiriéndose a las manifestaciones, a veces violentas, iniciadas después de la muerte de George Floyd en Minneapolis.
Bynum también fue informado por los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley que «grupos organizados» viajaban a Tulsa «con el fin de causar disturbios dentro y alrededor de la concentración». Estas personas «han estado involucradas en comportamientos destructivos o violentos en otros estados», dijo.
«Como se anunció anteriormente, el área ilustrada en este mapa deberá estar libre de vehículos y tráfico peatonal», escribió el Departamento de Policía de Tulsa. En un post separado en Facebook, la policía dijo que el área del centro de la ciudad estará restringida desde las 10 p.m. del jueves hasta las 6 a.m. del sábado.
Tras la orden, Trump advirtió en Twitter el viernes que «cualquier manifestante, anarquista, agitador, saqueador o delincuente que vaya a Oklahoma, por favor, comprenda que no lo tratarán como si hubiera estado en Nueva York, Seattle o Minneapolis… Será una escena muy diferente».
La Corte Suprema del estado rechazó una solicitud para exigir a los asistentes a la manifestación que usen una máscara facial y realicen distanciamiento social dentro de la arena de Tulsa.
«Por lo tanto, por falta de un lenguaje obligatorio en el (plan), estamos obligados a negar la reparación solicitada», escribió el tribunal en una declaración, informó The Associated Press.
Siguiendo la orden del alcalde de Tulsa, hubo informes de personas que estaban en la fila para la concentración que fueron expulsadas de la zona por la policía.
Según la campaña de reelección de Trump, más de 1,000,000 de personas se han registrado en línea para el encuentro de campaña de Tulsa, que se atiende por orden de llegada. La arena tiene una capacidad para, aproximadamente, 20,000 espectadores.
La manifestación es la primera que realiza Trump desde antes de la pandemia del virus PCCh (Partido Comunista Chino). Los partidarios debían firmar una exención que liberara a la campaña de Trump de la responsabilidad por la posible exposición al virus del PCCh, comúnmente conocido como nuevo coronavirus.
Las autoridades dijeron a AP, en un artículo separado, que 250 soldados de la Guardia Nacional del Ejército de Oklahoma fueron activados antes de la manifestación para proporcionar seguridad.
El jefe de policía de Tulsa, Wendell Franklin, dijo que los guardias serán utilizados como un «multiplicador de fuerza» para asegurar la arena del Centro BOK.
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