El presidente Donald Trump elogió al banco de inversiones JPMorgan Chase por instar a sus empleados a volver a la oficina después que la compañía implementara acuerdos de trabajo a distancia para reducir la posible exposición del personal al virus del Partido Comunista Chino (PCCh).
«Felicitaciones a JPMorgan Chase por ordenar a todos que regresen a la oficina el 21 de septiembre. ¡Siempre será mejor que trabajar desde casa!», dijo Trump en un tuit.
The Wall Street Journal el 10 de septiembre dio la noticia que el banco, uno de los mayores empleadores de Wall Street, había llamado a su personal de ventas y negocios de vuelta a la oficina el 21 de septiembre. Los empleados que tienen problemas con el cuidado de niños y condiciones médicas que los hacen más vulnerables al virus del PCCh están exentos de tener que trabajar en la oficina, según el artículo.
JPMorgan, que tiene su sede en Manhattan, envió a sus trabajadores a casa en marzo, junto con el resto de Wall Street, mientras la pandemia surgía en la ciudad de Nueva York, cerrando negocios y provocando ordenes de quedarse en casa. Después de casi tres meses de cierres, la ciudad comenzó a reabrir en junio, siendo la prohibición de comer en el interior de restaurantes la que más tiempo permaneció vigente.
El gobernador, Andrew Cuomo, dijo el 9 de septiembre que se permitirá a los restaurantes de la ciudad de Nueva York reanudar las comidas en el interior el 30 de septiembre, aunque bajo un conjunto de reglas restrictivas.
«Se aplicarán restricciones estrictas», dijo Cuomo en un tuit, detallando las restricciones. Los restaurantes estarán limitados a una capacidad del 25 por ciento, todos los clientes tendrán que someterse a un chequeo de temperatura en la puerta y usar mascarillas cuando no estén sentados en una mesa, que debe estar colocada al menos a seis pies de distancia. Además, un miembro de cada grupo tendrá que dar información de rastreo de contactos. No habrá servicio de bar y los restaurantes deberán cerrar a medianoche mientras se les apliquen normas más estrictas de filtración y purificación del aire.
Los elogios de Trump al banco de inversión de Wall Street se producen en medio de una iniciativa más amplia de la Casa Blanca para animar a las empresas y escuelas a reanudar la actividad de forma segura.
«Creemos que muchos distritos escolares pueden ahora reabrir de forma segura, siempre que apliquen medidas de mitigación y protocolos de salud para proteger a las familias, proteger a los maestros y proteger a los estudiantes», dijo Trump en un comunicado a mediados de agosto.
La Casa Blanca dijo que las consecuencias imprevistas de mantener las escuelas cerradas podrían causar daños a largo plazo en la educación de los niños y dificultar la recuperación económica.
Reforzando el impacto perjudicial de los cierres de escuelas en la economía, una agencia intergubernamental que trabaja para estimular el desarrollo económico advirtió recientemente que la interrupción de las escuelas relacionada con la pandemia podría costar a la economía de Estados Unidos alrededor de USD 15 billones en pérdidas de producción durante el resto del siglo. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) dijo en un informe (pdf) que, siempre que se pueda hacer de manera segura, la reapertura de las instalaciones educativas tendrá un impacto positivo en la producción económica.
«La reapertura de las escuelas y universidades aportará beneficios incuestionables a los estudiantes y a la economía en general. Además, la reapertura de las escuelas traerá beneficios económicos a las familias al permitir que algunos padres vuelvan a trabajar», escribieron los autores del estudio.
Sin embargo, el organismo advirtió que, si las escuelas tardan en volver a los niveles anteriores de rendimiento, el impacto perjudicial de la pandemia en la economía relacionado con la educación podría ser aún más costoso.
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