El expresidente Donald Trump elogió al gran jurado integrado en la investigación del fiscal del distrito de Manhattan contra él ante las versiones de que podría ser acusado pronto.
“Me he ganado tanto respeto por este gran jurado, y tal vez incluso por el sistema del gran jurado en su conjunto”, escribió Trump en Truth Social.
«La prueba es tan abrumadora a mi favor, y tan ridículamente mala para el fiscal de distrito altamente partidista y odioso, que el gran jurado está diciendo, espera, no somos un títere, como la mayoría de los grandes jurados son tachados de ser, no vamos a votar en contra de una preponderancia de la prueba o en contra de un gran número de juristas que dicen que no hay caso aquí. Abandonen ya esta cacería de brujas enfermiza», continuó diciendo.
El expresidente no dio más detalles. No está claro si Trump estaba reaccionando a la información filtrada que publicaron los medios de comunicación o si tenía información privilegiada.
La información de fuentes anónimas que surgieron el miércoles afirmaban que el gran jurado se tomaría un descanso de un mes. Un artículo de Politico que citó a «una persona familiarizada con los procedimientos» dijo que el gran jurado no escuchará las pruebas en el caso debido a una «pausa en la programación».
Alina Habba, abogada de Trump, dijo a The Epoch Times por correo electrónico el miércoles que la oficina del fiscal está “trayendo testigos repetidos y parece que el gran jurado no los permite. No es normal tomarse un descanso de tres semanas cuando se enfrenta a un estatuto de limitaciones”.
The Epoch Times no pudo confirmar inmediatamente esos reportes. La oficina del fiscal del distrito de Manhattan, Alvin Bragg, no ha respondido a una solicitud de comentarios.
Los fiscales están investigando el presunto papel de Trump en un pago de USD 130,000 que se le hizo a Stormy Daniels, una actriz de cine para adultos, que anteriormente había dicho que tuvo una aventura con Trump a principios de la década de 2000. Trump ha negado la aventura y cualquier delito relacionado con el pago, que al parecer se realizó durante su campaña presidencial de 2016.
El 18 de marzo, Trump escribió en las redes sociales que preveía ser acusado tres días después y convocó a protestas. Ese día llegó y pasó sin que se produjera ningún arresto, y la oficina de Bragg escribió más tarde una carta a los republicanos de la Cámara de Representantes diciendo que el expresidente afirmó erróneamente que sería arrestado.
Un abogado relacionado con Trump, Robert Costello, dijo el martes a Newsmax que cree que el exeditor de National Enquirer, David Pecker, testificó ante el gran jurado. Las noticias afirmaban que Pecker se reunió con el exabogado de Trump, Michael Cohen, en agosto de 2015 para ocultar historias sobre supuestas aventuras.
A inicios de este año, se informó que Pecker testificó ante el gran jurado, pero la oficina del fiscal del distrito lo volvió a llamar el lunes. Costello, quien testificó la semana pasada, dijo a los periodistas que trató de desacreditar el testimonio de Cohen, quien se declaró culpable de fraude fiscal y otros cargos hace años, y lo describió como un testigo poco confiable.
Durante la semana pasada, Trump se centró mucho en la investigación de Bragg y dijo que esta tiene motivaciones políticas. Bragg es demócrata, mientras que Trump busca la nominación presidencial republicana para las elecciones de 2024.
Durante el pasado fin de semana, su abogado, Joe Tacopina, dijo a «Meet the Press» de NBC News que el posteo de Trump en las redes sociales anunciando su inminente arresto se basó en información que se filtró a los medios de comunicación.
“Él no se lo inventó, estaba reaccionando ante un montón de filtraciones que salían de la oficina del fiscal del distrito. Hubo una filtración… aquel lunes, el día anterior a ese martes, hubo una reunión de las fuerzas del orden, incluidos el Servicio Secreto y la policía de Nueva York, en la que se iba a repasar la logística de la comparecencia», dijo Tacopina.
«Y luego hubo, por supuesto, muchos rumores respecto a que la comparecencia sería al día siguiente. Así que creo que, a partir de esas filtraciones, asumió que eso era lo que iba a ocurrir. Así que no se trataba de inventarlo, y desde luego él no quería ser arrestado», dijo Tacopina sobre Trump.
El expresidente también está siendo investigado en Georgia por su actividad tras las elecciones de 2020. El Departamento de Justicia (DOJ) nombró un abogado especial el año pasado para consolidar las diversas investigaciones que apuntan a Trump, incluida la relativa a si manejó incorrectamente material supuestamente clasificado que resultó en una redada del FBI en su residencia de Florida en agosto pasado.
Ese abogado especial, Jack Smith, también está investigando las declaraciones de Trump antes de la irrupción del 6 de enero de 2021 en el Capitolio de Estados Unidos. El 45º presidente ha negado haber actuado mal y ha dicho que los investigadores están inmersos en una «cacería de brujas».
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