El presidente Donald Trump firmó una ley el 30 de diciembre para combatir las llamadas automáticas.
La Ley TRACED Pallone-Thune, o S. 151 añade una multa por violaciones de la prohibición de ciertas llamadas automáticas.
También exige a los proveedores de servicios de voz que desarrollen tecnologías de autenticación de llamadas y ordena a la Comisión Federal de Comunicaciones que cree normas que establezcan cuándo un proveedor puede bloquear una llamada de voz con base en la información de las tecnologías.
Otra parte del proyecto de ley requiere que la comisión y el Departamento de Justicia formen un grupo de trabajo interinstitucional para estudiar e informar al Congreso sobre la mejor manera de hacer cumplir las leyes contra las llamadas automáticas mediante la evaluación de cuestiones como los tipos de leyes, las políticas o las limitaciones que podrían inhibir la aplicación de las mismas.
«Esta histórica legislación proporcionará a los consumidores americanos una protección aún mayor contra las molestas llamadas no solicitadas. Las familias estadounidenses merecen tener control sobre sus comunicaciones, y esta legislación actualizará nuestras leyes y reglamentos para fortalecer las sanciones, aumentar la transparencia y mejorar la colaboración del gobierno para detener las solicitudes no deseadas. El presidente Donald J. Trump se enorgullece de haber trabajado con el Congreso para llevar esta legislación bipartidista a su escritorio, y aún más orgulloso de firmarla hoy», dijo la Casa Blanca en una declaración.
El Senador John Thune (R-S.D.) y el Representante Frank Pallone Jr. (D-N.J.) fueron los autores del proyecto de ley.
«Todavía no he conocido a nadie que diga que disfruta recibiendo esas llamadas automáticas no deseadas e ilegales que plagan nuestros teléfonos, ya sea que estemos en casa, en el trabajo o en el auto, por lo que la Ley TRACED da varios pasos importantes en la lucha para frenar este flagelo», dijo Thune en una declaración del 19 de diciembre, luego de que el Senado aprobara una versión modificada del proyecto de ley.
«Este proyecto de ley representa un esfuerzo legislativo único que no solo es bipartidista en su esencia, sino que es apoyado casi unánimemente por el Congreso. Lo más importante es que es una victoria significativa para los consumidores en todos los rincones del país, y finalmente y oficialmente pone en evidencia a las llamadas automáticas ilegales. Aunque ningún proceso es perfecto, me alegro de que hayamos podido trabajar en conjunto con republicanos y demócratas, senadores y miembros de la Cámara de Representantes para alcanzar este importante compromiso, que, una vez que se convierta en ley, comenzará a dar un importante aporte a la lucha contra las llamadas automáticas ilegales».
Después de que la Cámara de Representantes aprobara la versión final el 13 de diciembre, Pallone dijo en un comunicado: «Esta es una legislación crítica porque las llamadas automáticas ilegales no solo son una molestia, sino que también afectan todo nuestro sistema telefónico y la seguridad de los consumidores como resultado. Con demasiada frecuencia, los estadounidenses simplemente no levantan sus teléfonos por temor a que una haya una llamada automática al otro lado de la línea. Es hora de que enviemos un mensaje a los estafadores y a los spammers de que sus días están contados».
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