El servicio de información electoral Decision Desk publicó el miércoles su primer pronóstico para las elecciones presidenciales de 2024, asignando a Donald Trump un 58% de probabilidades de una victoria, a pesar de que el presidente Joe Biden goza de una ventaja en el cargo y más fondos para la campaña.
Para ganar la carrera hacia la Casa Blanca, un candidato debe obtener 270 de los 538 votos disponibles en el Colegio Electoral. A menos de seis meses de las elecciones presidenciales de noviembre, Decision Desk publicó su primer pronóstico, que predice que el presidente Trump obtendrá 282 votos electorales frente a 256 del presidente Biden.
Esto corresponde a una probabilidad del 58% de una victoria de Trump, frente a una probabilidad del 42% para el presidente Biden.
En esta fase de la carrera, Decision Desk pronostica que el presidente Trump obtendrá 235 votos electorales frente a los 226 del presidente Biden, con 77 votos en juego.
El pronóstico sitúa actualmente a Arizona, Georgia, Michigan, Nevada, Pensilvania y Wisconsin como los seis estados en los que los dos candidatos se disputarán los 77 votos electorales.
«Aunque lo fundamental en la carrera —incluyendo la ventaja de la titularidad, los niveles de recaudación de fondos de campaña, y muchos factores macroeconómicos— favorecen en general a Biden, tanto las encuestas nacionales como las de los estados indecisos dan a Trump una clara ventaja», escribió el servicio en un posteo en X.
Pese a que el modelo Decision Desk incorpora los últimos datos y tendencias, el servicio de información electoral señala que sus previsiones «no son certezas, sino posibilidades».
El modelo Decision Desk también predice que los republicanos son los favoritos para anotarse un triplete, con un 80% de posibilidades de conquistar el Senado y un 64% de mantener la Cámara de Representantes, junto con el 58% de posibilidades de ganar la presidencia.
El ciclo electoral más caro de la historia
Aunque la recaudación de fondos de la campaña del presidente Biden para 2024 en abril fue inferior a la del presidente Trump por primera vez en este ciclo electoral, el titular demócrata sigue manteniendo una ventaja general en efectivo sobre su rival republicano.
El expresidente se aseguró la nominación republicana en marzo y ahora puede recaudar fondos con el Comité Nacional Republicano (RNC). La campaña de Trump y el RNC recaudaron 76 millones de dólares en abril, superando a la campaña de Biden y el Comité Nacional Demócrata (DNC), que recaudaron 51 millones.
Por el momento, ambos candidatos siguen siendo los presuntos nominados. Se esperan declaraciones definitivas en la Convención Nacional Republicana, en julio, y en la Convención Demócrata, en agosto, momento en el que los nombres de los dos candidatos quedarán formalmente nominados.
Según los informes de campaña enviados a la Comisión Federal Electoral, la campaña de Biden contaba con unos 84 millones de dólares en el banco a finales de abril, mientras que la campaña de Trump informó de que disponía de 49 millones de dólares.
El expresidente Trump ganó las elecciones presidenciales de 2016 a pesar de haber sido superado por la candidata demócrata Hillary Clinton.
En el ciclo electoral de 2020, el gasto en la carrera presidencial superó los 6000 millones de dólares, según OpenSecrets.org, un grupo de investigación no partidista que rastrea el dinero en la política estadounidense.
Se espera que el gasto en el ciclo de 2024 establezca nuevos récords, ya que la empresa de seguimiento de la publicidad AdImpact prevé que se gastarán más de 10,200 millones de dólares en anuncios políticos, es decir, aproximadamente un 13% más que hace cuatro años.
Debates en el punto de mira
Este año, las dos campañas presidenciales rivales eludieron el tradicional proceso de debate dirigido por la Comisión de Debates Presidenciales (CPD) y organizaron su propio calendario de debates.
El primer debate, que será el debate presidencial televisado más temprano de la historia, tendrá lugar el 27 de junio en CNN, Georgia, un estado clave en la contienda.
El segundo debate está previsto para el 10 de septiembre en ABC News, aunque aún no se ha decidido el lugar.
Ha habido algunas disputas entre las dos campañas sobre los debates. El presidente Trump está presionando por más fechas en su intento de desbancar al titular, mientras que la campaña de Biden acordó hasta ahora solo dos encuentros.
Como parte de las discusiones sobre la celebración de los debates, la campaña de Biden propuso cambios que la campaña de Trump aceptó. Estos cambios incluyen una fecha inusualmente temprana para el primer debate, la limitación del número de debates a solo dos, y saltarse la entrada habitual al escenario del debate, comenzando, en cambio, con ambos candidatos de pie en el podio.
Henry Olsen, investigador del Ethics and Public Policy Center, declaró a The Epoch Times que cree que el calendario del debate beneficiará más al Presidente Biden.
«Creo que la campaña de Biden ha decidido arriesgarse y hacer que Biden se enfrente a Trump al principio de la carrera, no más tarde», dijo Olsen a The Epoch Times, con la idea de que una buena actuación del presidente Biden podría dar impulso a su campaña de reelección.
Con la contribución de Lawrence Wilson
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