El expresidente Donald Trump ha respaldado al representante Kevin McCarthy (R-Calif) como candidato a la presidencia de la Cámara de Representantes antes de la cuarta ronda de votaciones del miércoles, después de que McCarthy no lograra hacerse con el puesto en las tres rondas de votaciones del martes, pero insistiera en que sigue siendo un aspirante.
Horas después de no poder hacerse con el mazo de la Cámara tras la oposición del Partido Republicano, McCarthy dijo el martes por la noche que todavía está compitiendo por el cargo de presidente e insistió en que Trump había «reiterado su apoyo» a su candidatura.
Trump, que tras el fracaso de la votación del martes se mostró inicialmente cauteloso a la hora de reiterar su apoyo, se dirigió a Truth Social más tarde ese mismo día para decir que apoya a McCarthy hasta el final.
“Algunas conversaciones realmente buenas tuvieron lugar anoche, y ahora es el momento de que todos nuestros GRANDES miembros republicanos de la Cámara VOTEN POR KEVIN” y “CIERREN EL TRATO”.
Trump, una figura influyente en los círculos republicanos, cuyo respaldo era muy codiciado por los candidatos republicanos antes de las elecciones intermedias de noviembre, instó a los republicanos a no convertir un “GRAN TRIUNFO EN UNA DERROTA GIGANTE Y VERGONZOSA”.
Los republicanos lograron retomar la Cámara en las elecciones de mitad de período.
«Kevin McCarthy hará un buen trabajo, y puede que incluso hacer un GRAN TRABAJO», añadió Trump.
Los registros muestran que hubo 14 instancias de elecciones de presidente que necesitaron múltiples votos, y la última vez que se necesitaron dos o más votos fue en el año 1923.
McCarthy, imperturbable
El drama del martes en el Capitolio hizo que la Cámara se levantara sin un presidente después de tres rondas de votaciones en las que McCarthy se quedó 15 votos por debajo de los 218 que necesitaba para hacerse con el puesto más alto de la Cámara.
Esa votación coronó dos días frenéticos de negociaciones en la trastienda de la Cámara y de posturas mediáticas por parte de McCarthy y sus partidarios y de un pequeño grupo de conservadores populistas disidentes que presionaron y ganaron varias concesiones de reforma, pero aun así votaron no.
Era la primera vez en 100 años que un candidato a presidente de la Cámara no podía tomar el mazo en la primera o segunda votación.
Aun así, a pesar de que la elección a la presidencia de la Cámara tuvo que ir a una cuarta vuelta el miércoles, McCarthy no pareció inmutarse.
En cambio, McCarthy prometió luchar hasta el final, diciendo que Trump lo alentó a poner fin a las disputas internas del partido y unir al Partido Republicano.
“Trump ya ha reiterado su apoyo. Hablé con él esta noche”, le dijo McCarthy a la prensa en el Capitolio después de salir de una reunión a puertas cerradas con sus seguidores.
El expresidente “quiere ver a los republicanos unidos para poder lograr exactamente las cosas que dijimos que haríamos”, continuó McCarthy.
Cuando se le preguntó si se retiraría, McCarthy insistió: «No va a suceder».
“Veremos qué pasa”
Los comentarios de McCarthy se produjeron después de que se le preguntara a Trump ese mismo día, en una entrevista con NBC News, si seguía apoyando a McCarthy después de que no pudo asegurar el mazo en tres rondas de votación y después que la Cámara se levantara sin un presidente.
“Veremos qué sucede”, le dijo Trump al medio en una entrevista telefónica. «Veremos cómo funciona todo».
La declaración posterior de Trump sobre Truth Social deja en claro que, después de obtener primero el respaldo del expresidente como presidente de la Cámara en noviembre, McCarthy sigue siendo la primera alternativa de Trump.
El expresidente respaldó a McCarthy como presidente antes de las elecciones de mitad de período de noviembre y más tarde, en diciembre, alentó a los republicanos a respaldar al republicano de California, advirtiendo en una entrevista con Breitbart que los oponentes de McCarthy estaban “jugando un juego muy peligroso”.
“Ahora, soy amigo de muchas de esas personas que están en contra de Kevin. Creo que casi todos ellos están muy inclinados hacia Trump y yo hacia ellos”, dijo Trump. “Pero tengo que decirles, y les he dicho, están jugando un juego muy peligroso”.
Una nueva generación de republicanos conservadores, muchos alineados por su cercanía a la agenda de Trump de Make America Great Again, han surgido como un desafío a los tratos de costumbre en Washington.
Hasta ahora, parecen estar comprometidos a detener el ascenso de McCarthy a menos que ganen concesiones a sus prioridades.
“Kevin McCarthy no va a ser un presidente de la Cámara”, declaró el representante Bob Good (R-Va.), uno de los reticentes.
La lucha más larga y agotadora por el mazo comenzó en diciembre de 1855, se prolongó durante dos meses y requirió 133 votos antes de que Nathaniel Banks fuera declarado presidente de la Cámara.
Cuarta Ronda
La Cámara tiene previsto reunirse el miércoles después de que el estancamiento obligó, esencialmente, a detener todos los demás asuntos.
Sin un presidente, la Cámara no puede formarse por completo y hacer cosas como tomar juramento a los miembros, nombrar a los presidentes de los comités, participar en los procedimientos del pleno e iniciar investigaciones sobre la administración Biden.
«Hoy, ¿es el día que quería tener? No», les dijo McCarthy a los periodistas a última hora del martes en el Capitolio.
McCarthy obtuvo no más de 203 votos en tres rondas de votaciones, perdiendo a 19 republicanos de su escasa mayoría de 222 escaños.
Los 19 republicanos que no votaron por McCarthy en la primera vuelta votaron por el representante Jim Jordan (R-Ohio) en la segunda vuelta.
En una tercera ronda, Jordan recibió los mismos 19 votos, así como un voto adicional del representante Byron Donalds (R-Fla.).
Camino de McCarthy a la victoria
Con una jornada de votaciones muy parecida a la de ayer no está claro cómo el asediado líder republicano puede ganarse a los conservadores de derecha que se oponen a su liderazgo.
El grupo conservador Freedom Caucus lidera la oposición a McCarthy. El grupo considera que no es lo bastante conservador ni lo bastante duro para enfrentarse a los demócratas.
McCarthy ya ha accedido a muchas de las demandas del Freedom Caucus, que ha estado presionando por cambios en las reglas y otras concesiones que otorgan a las bases más influencia en el proceso legislativo.
Si bien normalmente se necesitan 218 votos, lo que representa la mayoría de la Cámara, para convertirse en presidente, ese umbral puede reducirse si los miembros están ausentes o simplemente votan presente.
Si McCarthy consiguiera 213 votos y persuadiera a los restantes detractores para que votaran simplemente presente, podría reducir el umbral exigido por el reglamento para conseguir la mayoría.
Es una estrategia que varios expresidentes de la Cámara, incluida la presidenta saliente Nancy Pelosi (D-Calif.), utilizaron cuando se enfrentaron a la oposición, pero luego ganaron el martillo con menos de 218 votos.
“Obtienes 213 votos y los demás no dicen otro nombre, así es como puedes ganar”, dijo McCarthy el martes en el Capitolio.
Mark Tapscott, Madalina Vasiliu, Zachary Stieber contribuyeron a este artículo.
Con información de The Associated Press.
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