ROCKY MOUNT, Carolina del Norte—Un día después de que el presidente Joe Biden aparentemente llamó «basura» a los partidarios del expresidente Donald Trump, la candidata demócrata y vicepresidenta Kamala Harris instó a los estadounidenses a «dejar de señalarse con el dedo unos a otros» durante un acto de campaña en Raleigh, Carolina del Norte, el 30 de octubre.
Al mismo tiempo, Trump celebró un mitin en Rocky Mount, a unos 54 kilómetros al este de la capital del estado.
Trump llamó a sus partidarios el «corazón y alma» del país y afirmó que «esta elección es una decisión entre cuatro años más de incompetencia y fracaso evidentes o el comienzo de los mejores cuatro años en la historia de nuestro país».
Presentada en Raleigh por un exvotante republicano que antes había apoyado a Trump, Harris buscó atraer a conservadores reacios a apoyar al expresidente.
«Sabemos que tenemos la oportunidad en estas elecciones de pasar página a una década de Donald Trump, que ha tratado de mantenernos divididos y con miedo los unos de los otros», dijo Harris.
Harris añadió que ella «representará a todos los estadounidenses, incluidos aquellos que no voten por mí», y que «la gran mayoría de nosotros tenemos mucho más en común que lo que nos separa».
Harris dijo que Trump está enfocado en la venganza y en intereses personales, mientras que ella pondrá al país por encima del partido.
«Si él es elegido, el primer día Donald Trump entrará con una lista de enemigos», afirmó Harris. «Cuando yo sea elegida, entraré con una lista de cosas por hacer, llena de prioridades que llevaré a cabo para ustedes, el pueblo estadounidense».
En Raleigh, Harris no hizo referencia a los comentarios que Biden realizó durante un acto de campaña organizado por el grupo de defensa hispana Voto Latino el 29 de octubre.
Al criticar el mitin de Trump en el Madison Square Garden a principios de la semana, donde un comediante describió a Puerto Rico como una «isla flotante de basura», Biden dijo: «La única basura que veo flotando por ahí son sus partidarios».
«La demonización de los latinos por su parte es inconcebible y antiamericana. Es totalmente contraria a todo lo que hemos hecho y representado», añadió Biden.
Durante una rueda de prensa en la Casa Blanca el 30 de octubre, la secretaria de prensa Karine Jean-Pierre aclaró que Biden se refería a los comentarios del comediante y no a los partidarios de Trump como grupo.
En Rocky Mount, Trump recordó cuando, en 2016, la entonces candidata demócrata Hillary Clinton llamó a sus partidarios «una cesta de deplorables».
«Joe Biden finalmente dijo lo que él y Kamala realmente piensan de nuestros partidarios; los llamó basura, y lo dicen en serio, aunque, sin duda, mis partidarios tienen mucha más calidad que el Corrupto Joe Biden», afirmó Trump.
«Mi respuesta para Joe y Kamala es muy simple: No se puede liderar América si no se ama a los estadounidenses, y no se puede ser presidente si se odia al pueblo estadounidense, y aquí hay mucho odio».
Carolina del Norte es un estado en disputa que ambos candidatos desean ganar.
En 2008, Barack Obama se convirtió en el primer candidato presidencial demócrata en ganar Carolina del Norte en 30 años. Trump ganó en 2016 y luego superó a Biden por un 1.3 % en los votos de 2020.
Roy Cooper, demócrata que es gobernador desde 2017, habló en Raleigh antes de que Harris subiera al escenario, al igual que el fiscal general Josh Stein, quien compite para gobernador contra el republicano Mark Robinson.
Un promedio de encuestas de FiveThirtyEight del 30 de octubre mostró a Trump con una leve ventaja sobre Harris, con un 48.3 % frente al 47.2 %.
Según la junta electoral estatal, más de 3.1 millones de personas en Carolina del Norte ya emitieron su voto anticipado, y tienen tiempo hasta el 2 de noviembre.
El área occidental del estado sufrió graves inundaciones y deslizamientos de tierra por el huracán Helene, lo que provocó el desplazamiento de muchos residentes.
Las montañas del oeste de Carolina del Norte son consideradas un bastión republicano.
Los 25 condados que conforman la zona de desastre tienen 1.3 millones de votantes registrados.
En 2020, Trump obtuvo 604,119 votos frente a los 356,902 de Joe Biden en esos condados, según el analista político Ray Bonifay, quien destacó la importancia de la región en un comentario del 18 de octubre en RealClearPolitics.
En Rocky Mount, Trump elogió la participación en las votaciones anticipadas en Carolina del Norte e instó a los republicanos a «simplemente salir y votar».
El 30 de octubre, antes de partir para su jornada de mítines, Harris fue interrogada sobre el comentario de Biden sobre la «basura».
«Miren, en primer lugar, creo que él ya aclaró sus comentarios, pero déjenme ser clara: estoy totalmente en desacuerdo con cualquier crítica a las personas basada en por quién votan», dijo.
Luego le preguntaron a Harris si le preocupaba que los votantes se sintieran ofendidos.
«Soy sincera con lo que digo; cuando sea elegida presidenta representaré a todos los estadounidenses, incluidos los que no voten por mí, y atenderé sus necesidades y deseos», respondió.
Trump dijo a los asistentes en Rocky Mount que Harris y los demócratas han insultado a los republicanos «durante los últimos nueve años».
«Nos han intimidado, degradado, demonizado y censurado, y han usado el poder de nuestro propio gobierno en nuestra contra», dijo Trump.
«Kamala y su partido nos han llamado racistas, intolerantes, fascistas, deplorables, nazis irredimibles, y a mí me han llamado Hitler».
Trump dijo que su padre le enseñó a «nunca usar la palabra nazi» ni «la palabra Hitler».
«Ahora nos llaman nazis y a mí me llaman Hitler. Yo no soy Hitler», afirmó el expresidente.
Trump prometió terminar con la inflación y «detener la invasión masiva de criminales en nuestro país» y «traer de vuelta algo llamado el sueño americano».
También aseguró que devolvería a Estados Unidos la independencia energética y “perforar, perforar, perforar”.
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