El presidente Donald Trump emitió una advertencia a los talibanes durante sus comentarios en el Pentágono para conmemorar el 18º aniversario de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001.
Durante la ceremonia conmemorativa, el presidente sacó a relucir las conversaciones de paz secretas recientemente desechadas con el presidente afgano Ashraf Ghani y los talibanes, diciendo que el grupo terrorista mostraba una «debilidad implacable» cuando lanzaron un ataque terrorista en Kabul, que dejó 12 personas muertas, incluyendo un soldado estadounidense de Puerto Rico.
“Teníamos conversaciones de paz programadas. Hace unos días, los suspendí cuando me enteré de que habían matado a un gran soldado estadounidense de Puerto Rico y a otras 11 personas inocentes», dijo Trump. “Pensaron que usarían este ataque para mostrar fuerza, pero en realidad lo que mostraron es una debilidad implacable. Los últimos cuatro días, hemos golpeado a nuestro enemigo con más fuerza que nunca. Y eso continuará».
Luego continuó advirtiendo que usaría una fuerza sin precedentes contra los talibanes y otros terroristas potenciales si alguna vez deciden atacar a los Estados Unidos nuevamente.
«Y si, por alguna razón, regresan a nuestro país, iremos a donde sea que estén, y usaremos el poder, como nunca antes lo ha usado Estados Unidos, y ni siquiera estoy hablando de poder nuclear», dijo. “Nunca habrán visto algo como lo que les sucederá. Ningún enemigo en la tierra puede igualar la abrumadora habilidad de fuerza y el poder de las fuerzas armadas estadounidenses».
El presidente anunció el 7 de septiembre que las negociaciones de paz habían sido suspendidas luego de enterarse del ataque de Kabul. Al hacer el anuncio por Twitter, dijo que los talibanes habían admitido que lanzaron el ataque con el fin de «aparentemente fortalecer su posición de negociación».
«No lo hicieron, ¡solo lo empeoraron! Si no pueden aceptar un alto al fuego durante estas importantes conversaciones de paz, e incluso matarían a 12 personas inocentes, entonces probablemente no tengan el poder de negociar un acuerdo significativo de todos modos. ¿Cuántas décadas más están dispuestos a luchar?”, escribió Trump en ese momento.
Se programaron dos reuniones privadas en Camp David, una con el presidente afgano Ashraf Ghani y otra con los principales líderes talibanes, para el 8 de septiembre, en un intento de poner fin a la guerra de casi 18 años en Afganistán que comenzó cuando la administración Bush invadió el país en octubre de 2001 luego de los ataques del 11 de septiembre.
Desde entonces, Estados Unidos ha perdido más de 2400 soldados y gastó más de USD 800.000 millones en la guerra. Estados Unidos y la OTAN concluyeron formalmente su misión de combate en 2014, pero las tropas estadounidenses y aliadas permanecen, realizando ataques contra el grupo terrorista ISIS y los talibanes, y trabajando para entrenar y construir el ejército afgano.
El 9 de septiembre, Trump confirmó a los periodistas que las conversaciones de paz estaban «muertas» y calificó las acciones de los talibanes como «un gran error».
Junto con la Primera Dama Melania Trump y varios de sus principales asesores y miembros del gabinete, incluido el Secretario de Defensa Mark Esper, Trump relató su reacción luego de que los terroristas islámicos atacaran las Torres Gemelas.
«Estaba mirando por la ventana desde un edificio en el centro de Manhattan directamente al World Trade Center cuando vi el segundo avión a una velocidad tremenda entrar en la segunda torre», dijo. «Fue entonces cuando me di cuenta de que el mundo iba a cambiar».
El presidente felicitó a los primeros en responder y a los civiles por su valentía ese día, mencionando a algunos de ellos por su nombre, incluido a Rick Rescorla, quien recibirá la Medalla Presidencial de los Ciudadanos a título póstumo.
A principios de este año, Trump firmó la «Ley de Nunca Olvidar a los Héroes», que efectivamente extiende el Fondo de Compensación de Víctimas del 11 de septiembre hasta el 2092.
El Associated Press contribuyó con este informe.
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