El presidente Donald Trump hizo un llamado el domingo a los estadounidenses para que enfrenten el creciente antisemitismo en los Estados Unidos luego de un ataque a puñaladas en la casa de un rabino del área de Nueva York que dejó cinco personas heridas en Janucá.
El sospechoso fue identificado por las autoridades como Grafton E. Thomas, quien fue acusado el domingo de cinco cargos de intento de asesinato y un cargo de robo por el ataque en el condado de Rockland.
«El ataque antisemita en Monsey, Nueva York, en la séptima noche de Janucá de anoche es horroroso. Debemos unirnos todos para luchar, confrontar y erradicar el malvado flagelo del antisemitismo. Melania y yo les deseamos a las víctimas una rápida y completa recuperación», escribió Trump en Twitter el domingo por la tarde, refiriéndose a la Primera Dama Melania Trump.
El Asistente del Fiscal de Distrito del Condado de Rockland, Michael Dugandzic, dijo en la corte que él cree que Thomas no tenía ninguna conexión personal con las víctimas.
«Es un delito serio. El acusado entró en la residencia, hiriendo gravemente a cinco personas, una de ellas con una fractura de cráneo que aún está en estado crítico. Luego huyó de la jurisdicción», dijo Dugandzic, según informó el New York Post.
En su declaración en Twitter, Trump pareció estar a punto de describir el ataque como terrorismo.
Pero el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, utilizó el término cuando habló con los reporteros afuera de la casa del rabino en Monsey, que es una comunidad predominantemente judía ortodoxa ubicada dentro del área metropolitana de la ciudad de Nueva York.
«Llamémoslo como es. Estas personas son terroristas domésticos y la ley debería reflejarlo y deberían ser castigados como si se tratara de un acto de terrorismo», dijo el gobernador a los periodistas el domingo.
Cuomo convocó a la Fuerza de Tarea de Crímenes de Odio de la Policía del Estado de Nueva York para que investigue el último caso en una «perturbadora» tendencia de por lo menos 13 ataques antisemitas en el área metropolitana de la ciudad de Nueva York en los últimos meses.
«Es importante para mí expresar al rabino y a toda la gente de Nueva York que la intolerancia se encuentra con la ignorancia, se encuentra con la ilegalidad. Vemos enojo. Vemos el odio que explota. Es un cáncer americano en el cuerpo político», agregó Cuomo a los reporteros.
Aron Kohn, quien estuvo en la ceremonia de Janucá del rabino Chaim Rottenberg, dijo a ABC News que abrió la puerta el sábado por la noche y vio al sospechoso empuñando un gran cuchillo que era «como un palo de escoba».
El atacante entró en la casa y movió el cuchillo, cortando a las víctimas. El pánico se extendió y la gente salió corriendo por la puerta trasera, recordó.
«Lo vi apuñalar a gente», dijo Kohn. «Hirió a un hombre, sangraba [por el cuello], sangraba en la mano, por todas partes».
El alcalde de la ciudad de Nueva York, Bill de Blasio, cuya ciudad ha visto un aumento de ataques antisemitas, dijo que su ciudad va a «utilizar todas las herramientas que tenemos para detener estos ataques de una vez por todas».
El ataque también provocó una respuesta del primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, quien dijo a los medios de comunicación que su gobierno «cooperará en la medida de lo posible con las autoridades locales para ayudar a derrotar este fenómeno», y ofreció «los mejores deseos de recuperación a los heridos».
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